Las nuevas motivaciones de Alonso

Fernando Alonso anunciará en los próximos días de forma oficial que deja Ferrari. La incógnita ahora es saber por qué equipo ficha, una escudería capaz de volver a hacerle campeón del mundo o de, al menos, de hacerle recuperar la ilusión y olvidar los problemas generados fuera del circuito.

Volver a ganar un Mundial. Tras siete temporadas en blanco, aunque en dos de ellas llegó con opciones de título a la última carrera (2010 y 2012), Alonso quiere y necesita un nuevo título en su palmarés con el que reivindicarse ante sus críticos como el mejor piloto de la parrilla. Lograr un tercer campeonato le haría escalar puestos en el 'salón de la fama' de la F1 y situarse solo por detrás de Schumacher (siete títulos), Fangio (cinco), Prost y Vettel (cuatro).

Tres Mundiales, como Senna. "Senna siempre ha sido una inspiración para mí. Ganar tres campeonatos como él sería la realización de mi sueño", ha señalado en repetidas ocasiones el piloto español. Además, el español podría lograrlo pilotando un McLaren y propulsado por un motor Honda, como hizo el brasileño en 1988, 1990 y 1991.

Ganar sin el mejor coche. A Vettel se le ha acusado de ganar por tener el mejor monoplaza de la parrilla y Alonso puede motivarse al hacerlo sin tener el mejor motor, Mercedes, ni al mejor ingeniero, Adrian Newey. En Ferrari a punto estuvo de conseguirlo en 2010 y en 2012.

Ganar con Ferrari y/o McLaren. El español ha corrido con las dos escuderías más laureadas de la Fórmula 1 y no quiere irse sin ganar un título con alguna de ellas. En Ferrari se le resistió y solo Gerhard Berger no fue capaz de ganar un campeonato habiendo corrido para ambos equipos. Alonso no quiere pasar por este mal trago.

Lograr más poles. Alonso ha demostrado ser tremendamente competitivo en carrera, pero ser rápido a una vuelta es uno de sus puntos débiles. El español 'solo' ha logrado 22 poles en su carrera en la Fórmula 1, muy por debajo de las logradas por Sebastian Vettel (45) o Lewis Hamilton (38, contabilizada la del Gran Premio de Rusia). Sus números en Ferrari son desoladores: 4 poles en cinco temporadas. Por esto, uno de los 'deberes' del español en su nueva etapa en la Fórmula 1 debe ser recuperar esa frescura en las calificaciones que mostró en su etapa en Renault (logró seis poles cada uno de los años que ganó el título).

Nuestra opinión: Alonso-Ferrari era un matrimonio idílico y este romance comenzó de la mejor forma, con una victoria del español en su primera carrera de rojo en 2010. Cinco Mundiales después, sigue siendo bicampeón del mundo cuando en paso al equipo italiano se presagiaban más éxitos. Una historia que no ha acabado bien para nadie.