Real Madrid-Atlético, el post del postpartido: Anatomía de un empate a todo

Los azulgrana celebran: dependen de ellos mismos para volver a ganar la Liga. Como el Madrid, ojo, pero es que hace nada no parecía tan posible.

Y eso que el derbi iba encaminado a decidirse por un simple detalle, el del cabezazo de Pepe que sí entró a los 52 minutos y, en cambio, otro similar de Saúl a los 3 minutos que no. Era un poco injusto resumir el partido en esa frase previa, pero ahí anduvo la cosa hasta el empate de Griezmann, al que algunos colocan en el Madrid cuando es más feliz que una perdiz de rojiblanco. Y no hay más.

Vamos con los principales protagonistas del derbi en el Bernabéu, al que Simeone se ha abonado a no perder:

El gol de Pepe, un cabezazo limpio de polvo y paja a los 52 minutos, reivindicó la figura del internacional portugués, brasileño de nacimiento. Al poco, en cambio, Kroos lo lesionó en un choque brutalmente fortuito, como si un trozo del muro de Berlín se le cayera encima. Sufre dos costillas fracturadas, un mes de baja. Fue ovacionado Pepe por el Bernabéu e incluso se besó el escudo tras el tanto. Idilio que parecería obligado, pero que aún no haya renovado lo ubica en el disparadero. Otro de esos es Isco, quien salió por Kroos y que todavía no ha ampliado contrato con el Madrid, lo que ha revalorizado su figura en el mercado.

En el Atleti, Carrasco es verso libre del puro talento que rezuma. Y eso está muy bien, es su indiscutible valor. Pero también desespera a cualquiera (sobre todo a Simeone) cuando se pasa de individualista. Así que se perdió entre equilibrios con la línea de banda. Quién no regaló ni un metro de posición fue Oblak, quien mostró al mundo todo su potencial en el Bernabéu. Dio un festival de paradas y despejes para confirmarse como lo que seguramente es, el mejor portero del fútbol del momento a sus 24 años. Hasta le ha crecido el pelo.

El tanto de Griezmann en el minuto 85 instauró un miedo desconocido en lo blanco. Ya lo dijo Zidane en la previa. Que no estaba preparando la pretemporada siguiente. Dependerá del Barça en La Rosaleda mantener ese desasosiego justo ahora que llegan sin un respiro los alemanes del Bayern, formidable oponente.

Al Atleti lo que le emociona es la sensación de que ha vuelto a llegar en su punto a su competición, que es la Champions. Y el Leicester seguramente tiembla. Como cambia todo en el fútbol por un simple gol.

PD: Poco que escribir de Cristiano Ronaldo y Fernando Torres. Cualquier tiempo pasado...