Totti, Jesé y Augusto, los nombres del día

Francesco Totti cumple este martes 40 años y está disputando su última temporada en la Serie A. El mítico centrocampista italiano celebra su cumpleaños con un palmarés envidiable con el auténtico amor de su vida: AS Roma.

El ‘one club men’ ha jugado 763 partidos con 306 goles en toda su carrera. Es un auténtico especialista desde los once metros de los cuales ha marcado 71, récord de la Serie A. Muchos futbolistas y compañeros del deporte han aprovechado la ocasión para felicitar al ‘Capitano’.

La historia de amor de Totti con la Roma es una leyenda poco común hoy en día en el fútbol. Llegó con 17 años y desde entonces solo ha pensado en retirarse en club romano.

Hace pocas jornadas Jesé protagonizó una escena que llamó la atención de todos los medios. El ex jugador del Real Madrid se marchó enfadado al banquillo cuando Emery decidió sustituirlo durante un mal partido del canario.

Ante los micrófonos de la Cadena cope, Unai Emery explicó el momento de Jesé en el PSG. "Está trabajando bien, aún no ha encontrado una casa en la que está a gusto. Tiene que terminar de adaptarse, es cuestión de tiempo" explicó el técnico vasco.

Ya lo avisó Jesé: “No vine al PSG para ser suplente”. Veremos si el canario entiende las intenciones de Emery y llegan a un punto de encuentro por el bien de ambos y del equipo galo.

Augusto Fernández, lesionado este fin de semana del ligamento cruzado, recibió la visita sorpresa de varios de sus compañeros en su casa. Una buena excusa para reunirse con el argentino y transmitirle toda la fuerza del vestuario rojiblanco para que la recuperación sea más llevadera.

Augusto agradeció la sorpresa colgando una foto en su Instagram una foto en la que se le ve portando un plato de asado junto a su muleta, la cual le acompañará los próximos seis meses. Junto a él se encontraba un capitán, Godín, ejerciendo de buen compañero para que las fuerzas no flaqueen.

No tiene que ser nada fácil la situación de Augusto, sabiendo que se perderá más de media temporada por culpa del ligamento cruzado. Este tipo de gestos de sus compañeros le harán recuperar los ánimos y afrontar con más ganas todas las fases de recuperación.