Masters 1.000 de Shanghái, Nadal-Donaldson: Vuelta al lugar donde empezó todo (12:30)

Nada hacía presagiar que Nadal, después de su lesión de muñeca y cerrar 2016 como su peor temporada desde 2004, iba a volver con más fuerza si cabe a la cima del tenis mundial. Si le hubiéramos dicho en ese momento que en 2017 conquistaría dos nuevos Grand Glams, e iba a ser sólido número uno con más de 2.000 puntos de diferencia sobre su más inmediato perseguidor, Roger Federer, probablemente hubiera esbozado una sonrisa de incredulidad ante lo que estaba viviendo tras el torneo chino, fruto de la prisa por intentar competir en los Juegos Olímpicos de Río.

Sin embargo, ese mal final de año es el que le está permitiendo prácticamente asegurar con un juego espectacular y en plena forma, cerrar el curso como número uno. Junto a Federer, también fuera por lesión en 2016, han vuelto a dar un vuelco en los puestos más importantes del ránking de la ATP, y han precipitado el parón obligado por problemas de físicos de jugadores tan importantes como Novak Djokovic, Andy Murray o Stan Wawrinka, buscando en el ejemplo de Nadal y el helvético, la manera de resurgir para 2018.

Un Nadal encendido, después de romper una sequía en Pekín que se mantenía desde 2005, buscará en Shanghái conquistar un título de los pocos que se resisten en su ya dilata carrera. Desde el curso 2009 se disputa el Masters 1.000 chino, y precisamente en el debut del torneo, el español consiguió su mejor prestación perdiendo la final ante el ruso Nikolay Davydenko. Con dos semifinales en 2013 y 2015, este año solamente tendrá que superar la segunda ronda ante Jared Donaldson para sumar en positivo en la lucha por el número uno mundial.

Contra el estadounidense, que se encuentra inmerso en la lucha por meterse en el Next Gen ATP Finals de Milán, no ha disputado todavía un partido dentro del circuito en lo que será un choque inédito entre el número uno mundial y el 56, que como mejor resultado este año tiene unos cuartos de final en el Masters 1.000 de Cincinnati, donde cayó ante su compatriota John Inser, derrotando entre otros en su camino a Roberto Bautista.

Una joven promesa del tenis estadounidense, posiblemente junto a Frances Tiafoe, de los que más han brillado entre la nueva hornada de tenistas que buscan suceder a los Isner, Querrey, Sock y compañía, que sin embargo se encontrará contra un Nadal en plena forma cuyo únicp rival puede ser él mismo y el posible cansancio acumulado después de su semana triunfante en Pekín.