LEB

Los gallegos lo hicieron contagiados por la fiesta de sus ciudades Adecco ante un CiP Lleida que se mantuvo en partido durante todo el primer tiempo con unas diferencias que rondaban los 10 tantos de desventaja. Con el inicio del tercer acto, los catalanes comenzaron a ceder terreno viendo como su rival se distanciaba hasta la veintena de tantos. La gran noche de Maxwell Kendall y Andrés Rodríguez, clave para el club gallego (86-60).

Por su parte, el CB Murcia sacó tajada del apoyo de los dos autobuses desplazados desde su localidad imponiéndose con contundencia a un Fundación Adepal Alcázar que tan sólo aguantó el tirón durante unos minutos del primer periodo (62-81). Los puntos de Jasen, Rivero o Umeh dieron a los visitantes una ventaja de 24 tantos al descanso que permitieron dar descanso a los principales protagonistas durante la segunda parte del encuentro.

Pero si el ascenso no se decidirá hasta la última jornada mucho menos sucederá con un descenso directo al que parecía condenado el Aguas de Sousas Ourense y que podría cambiar de protagonista el próximo viernes. Los gallegos se impusieron a un Melilla que se queda sin objetivo para la última jornada aprovechando la derrota de Alcázar ante Murcia (68-56).

No menos atractivo resultó el encuentro que disputaron en Fontajau el Girona FC y el Ford Burgos con victoria para los locales (78-68). Sorpresa agradable la que protagoniza de igual modo un Grupo Iruña Navarra que derrotó a Baloncesto León por 67-56. En la zona media-alta, victorias de Leche Río Breogán e Isla de Tenerife Canarias.