Froome da el golpe definitivo a Contador en el Mont Ventoux

La etapa donde Alberto Contador podía hacer daño a Chris Froome sólo tenía un puerto, pero era el Mont Ventoux. Los más de 220 kilómetros previos se corrieron a una velocidad de vértigo, pero cuando a falta de seis kilómetros para esta cima mítica del ciclismo atacó el líder del Tour de Francia, su velocidad también fue demoledora hasta que acabó levantando los brazos en una victoria que puede valer por dos.

En primer lugar porque demuestra que es el más fuerte pese a que su equipo estaba flaqueando en las últimas jornadas y en segundo y mucho más importante porque da un golpe casi definitivo a Alberto Contador (perdió 1:40 en meta) y al resto de sus principales rivales que osaran intentar discutirle el maillot amarillo de aquí a París.

El equipo Sky no metía el ritmo ni el respeto que se había ganado desde que comenzó 2012 y en todo lo que va de 2013 cuando pasado el pueblo de Bedoin, al pie del Mont Ventoux, se puso a tirar con tan sólo tres ciclistas. La ascensión hacia ese árido paisaje comenzaba y el SaxoTinkoff de Alberto Contador parecía aguantar cómodo manteniéndose detrás de esas ruedas. El penúltimo de sus peones, el joven y aún más inexperto en estas batallas Peter Kennaugh se descolgó, pero dio paso un dolido Richie Porte que tras perder todas sus opciones hace siete días dio una valiosa ayuda a su jefe. El australiano fue tensando al grupo, una tensión que descompuso a todos los favoritos. En apenas un puñado de metros de subida sólo quedaban tres invitados a la fiesta: el propio Porte, Froome y Alberto Contador.

Apenas un kilómetro después el australiano espoleó a su jefe y líder Froome, éste bajó la cabeza, abrió más sus brazos sobre el manillar y comenzó a mover más deprisa sus piernas y golpear más veces sus pedales. Fulminante. Alberto Contador se quedó atrás perdiendo su rueda y perdiendo, salvo que vuelva a intentarlo y el inglés desfallezca, su oportunidad de remontar y poder ganar este Tour de Francia.

Froome dio caza al colombiano Nairo Quintana, quien había atacado mucho antes. En el camino Contador se encontró a otro de los que atacó pronto, el vasco Mikel Nieve. El madrileño habló con él y ambos se aliaron para subir juntos. Pero al inglés aún le quedaba gas para a falta de poco más de un kilómetro desprenderse de Quintana, acabar metiendo 1:40 segundos a Alberto Contador y acabar ganando algo más que una etapa.