Quintana y Valverde juntos: Difícil que funcione

Juntos, "más fuertes y más temibles" para los rivales. "Creíamos que el equipo con ambos juntos mejora mucho y separarlos nos debilita también mucho. Nos permitiría cubrir más objetivos tenerlos separados, pero ambos estaban de acuerdo con la decisión y creían interesante ir juntos, pues ello les permite compartir responsabilidad y, además, nos hace un equipo más temible y más fuerte ante los rivales", afirma el director del equipo Eusebio Unzué.

Con dos líderes potentes se puede ganar el Tour. El 2012 Bradley Wiggins y Chris Froome dominaron a su antojo la carrera siendo primero y segundo, respectivamente. En 2013 dominó Froome, sin Wiggins pero con Richie Porte quien intentó aspirar al segundo lugar de la clasificación pero se hundió en la clasificación general. Algo similar ocurrió con Alberto Contador y Lance Armstrong en 2009, primero y tercero, pero con una guerra interna en el equipo.

Y también se puede perder. En la edición de 2011 Andy Schleck y su hermano Frank tenían todo de cara para ser primero y segundo en París y ambos subieron al podio, pero acabaron sucumbiendo ante Cadel Evans.

Valverde y Quintana en grandes vueltas, siempre lejos de subir juntos al podio. Una avería mecánica cuando el murciano estaba muy cerca del líder Froome en 2013 le alejó de sus aspiraciones. El equipo decidió no sacrificar a Nairo para intentar reagrupar a su compañero al grupo de favoritos en aquella etapa llana plagada de abanicos camino de Saint Amand-Montrond. Se alejó del podio aunque con el paso de la carrera el colombiano fue subcampeón y mejor joven y Valverde finalizó en octavo lugar en la clasificación general.

En la pasada Vuelta a España Valverde subió al podio y Quintana se fue al suelo en la contrarreloj de Borja cuando era líder y tuvo que retirarse. Fue la tercera gran vuelta que corrieron juntos y en la que no compartieron podio. En la Vuelta 2012 un bisoño Quintana pocas veces anduvo entre los mejores.

Nairo prefiere hacer solo una que dos a medias. En una reciente entrevista publicada en el diario ‘El País’, el joven colombiano aseguró que él prefiere correr una gran vuelta para ganarla antes que hacer dos sin ir a tope. Palabras con las que puede interpretarse que preferiría centrarse en un solo objetivo.

Valverde lo tiene claro: Nairo será el líder. Este debate se inició el pasado lunes cuando el murciano recibió el premio como número uno del ranking UCI World Tour que le coronó como mejor ciclista de 2014. En sus declaraciones aseguró que su gran objetivo para 2015 sería intentar el podio en el Tour que tan cerca se le quedó en la pasada edición. Pero en el comunicado difundido por el equipo desde Pamplona su discurso es ponerse al servicio de su compañero colombiano: "Nairo puede optar perfectamente a ganar el Tour; yo puedo estar cerca, pero lo puedo tener más complicado que él, y por ello soy realista: en el Tour debemos estar al cien por cien con Nairo, acompañarle hasta el final y mantenernos juntos, para tener una ventaja sobre los rivales".

Pero es un Tour que viene bien a Valverde. Ausencia de contrarrelojes individuales largas que tanto penalizan al murciano. Bonificaciones y etapas tipo clásicas en la primera semana de competición y ausencia de etapas que acumulen varios grandes puertos de alta montaña. Él no es un escalador puro y podría moverse bien en este terreno. Apunta, esta vez sí, a ser su última gran oportunidad.

¿Por qué no el Giro? Salvo Contador, se queda desierto de grandes aspirantes. La más que posible renuncia de Vincenzo Nibali a correr la carrera de su país y el objetivo (todavía no confirmado) de Chris Froome de doblar Tour y Vuelta, dejan un Giro de Italia propicio para que Nairo Quintana intente repetir su victoria de 2014.

Nuestra opinión: Movistar ha expuesto buenos argumentos para unir a Quintana y Valverde en Tour y Vuelta, pero el equipo debería dejar bien claro quién es el líder real desde la primera carrera en lugar de intentar que los dos suban al podio, algo que hasta la fecha no ha sucedido.