El deporte de la esgrima en España, al alza

Son tiempos complicados para el mundo del deporte, que ha visto la práctica totalidad de sus eventos cancelados o pospuestos a raíz de la epidemia del Covid-19 en todos los países. En el caso de España, el aplazamiento de la mayoría de campeonatos de esgrima no mengua la ilusión de nuestros atletas y su confianza en volver a batirse sobre la pista con los mejores del mundo.

De hecho, este deporte ha ido ganando adeptos en los últimos años. Y es que desde que el espadista José Luís Abajo “Pirri”, ganó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Pekín en el año 2008, la práctica de este deporte aumentó hasta el punto de que en la actualidad, nuestros esgrimistas participan con regularidad en todos los torneos internacionales del más alto nivel.

Los resultados .obtenidos no hacen sino confirmar la buena racha de los atletas españoles. De cara a los Juegos que debían celebrarse en Tokio este próximo verano, nuestro país contaba prácticamente con dos atletas clasificados.

En efecto, tanto Carlos Llavador como Teresa Díaz Escalona estaban a un paso de conseguir su pasaporte olímpico. Carlos Llavador ha sido cinco veces campeón de España y en tres ocasiones campeón de Europa. Otro título más en su palmarés es el que obtuvo en el año 2017 cuando se llevó la medalla de bronce en los Campeonatos Mundiales de Wuxi (China) en el año 2018. Ese año, además, España se llevaba el oro en los Juegos del Mediterráneo con la victoria del espadista Yulen Pereira, otra de nuestras grandes promesas.

En cuanto a las victorias de la esgrima femenina española, encontramos junto a la joven Teresa Díaz, grandes atletas que han dado muchos triunfos. Por poner un ejemplo, Araceli Navarro que fue la esgrimista española más joven en competir en unos Juegos Olímpicos (Pekín 2008, con tan solo 19 años) y subcampeona mundial de sable; o Lucía Martín Portugués, con varios triunfos a sus espaldas.