Australia-Japón, la final

Australia, clara favorita y equipo con mejor coeficiente FIFA del torneo, impuso su mayor experiencia y su poderío físico para derrotar a Uzbekistán (6-0) y plantarse en la final de la Copa de Asia por primera vez desde que en 2006 se uniera a la confederación asiática.

El experimentado delantero del Galatassary turco Harry Kewell abrió a los cinco minutos de partido una fácil goleada sobre el combinado uzbeko. El central Ognenovski (m.35), David Carney (66), Brett Emerton (75), Carl Valeri (82) y el joven Robbie Kruse (m.83), aprovechando un error del meta uzbeko, completaron la victoria australiana, que coloca a los de Osieck en su primera final continental desde que entraran en la AFC, en 2006.

Corea del Sur cobraría ventaja después al transformar el centrocampista del Celtic de Glasgow Ki Sung-Yueng un claro penalti por empujón a Park cuando se colaba entre dos defensas. Apenas sin tiempo para disfrutar de una ventaja que no habían merecido, Japón equilibró de nuevo el choque con un excelente gol de de Ryoichi Maeda.

Al filo del final del partido, Zaccheroni retiró a un cansado Kagawa, y dio entrada al centrocampista del Asburgo alemán, Hajime Hosogai, quien adelantaría a su equipo en el minuto 105 de partido, al recoger un rechace del portero tras una pena máxima mal lanzada por Honda.

Corea del Sur, consciente de que se le escapaba la posibilidad de llegar a la final echó el resto en los quince últimos minutos, en los que un balón colgado al área no fue defendido bien y tras una serie de rechaces, Jae Won llevó a su equipo a la muerte súbita.

Allí, sus compañeros fallaron cuatro de los lanzamientos, ante un Kawashima que tras mostrar algunas dudas en los cuartos, dio a su equipo el pase a la final del viernes y la opción de convertirse en la escuadra más laureada de Asia.