La maldición del Athletic: de Rey de Copas a seis finales perdidas

Ha llovido mucho desde la última vez que el Athletic ganó una Copa del Rey. El segundo club más laureado de la historia (durante un largo tiempo fue el primero) con 23 títulos en su haber no consigue levantar el trofeo de Su Majestad desde 1984. Aquel año los leones firmaron un doblete histórico con Javier Clemente en el banquillo y futbolistas de la talla de Zubizarreta, Goicoechea, Manolo Sarabia, Argote o Endika, además de un joven Julio Salinas.

El crecimiento de la Primera División española, la llegada de numerosos futbolistas extranjeros de nivel a raíz de la Ley Bosman y el hecho de mantener una filosofía de contar solo con jugadores vascos limitó mucho las aspiraciones del Athletic, que fue relegado a un segundo y a veces tercer plano. Pasó de luchar por todos los títulos nacionales en juego a caer en picado en la clasificación, firmando las peores clasificaciones de su historia (14º en 1992, 15º en 1996 e incluso rozando el descenso con un 17º en 2007). Pero los leones resurgieron, y demostraron su buen hacer en su torneo favorito.

En 2009 dieron una lección a José María del Nido remontando el 2-1 del Pizjuán para ganar 3-0 al Sevilla y meterse en la gran final que se disputaba en Mestalla. El rival, desgraciadamente para el cuadro de Joaquín Caparrós, fue el imbatible Barça de Guardiola, que inició el sextete con un inapelable 4-1. Y eso que se habían adelantado en el marcador por medio de un Gaizka Toquero que se había convertido en el ídolo de San Mamés.

Pero el Athletic, que recuperó cierta estabilidad (entre 2014 y 2017 no bajó del séptimo puesto en Liga) le volvió a coger el gusto a la Copa y disputó dos finales más, las dos de nuevo ante el Barça. Nunca estuvo cerca de lograr el triunfo. En el Vicente Calderón marchaba 0-3 a los 25 minutos de partido. En el Camp Nou perdía también 0-3 hasta que en el 80’ Iñaki Williams maquilló el resultado. En 2018 tocó fondo: 16º en Liga y eliminación en dieciseisavos de final de Copa ante el modesto Formentera.

Tras una transición dura y difícil, el Athletic volvió a sorprender el pasado año alcanzando la final en la nueva Copa de Rubiales, eliminando a su mayor verdugo (el Barça) en cuartos. La pandemia lo paralizó todo y la histórica final ante la Real Sociedad no se pudo disputar hasta hace un par de semanas. La ganó la Real (que llevaba desde 1987 sin ganar el título) dejando al cuadro bilbaíno con un registro desalentador: cinco finales consecutivas perdidas, cuatro en 11 años.

Actualmente, el Athletic es el segundo equipo con más de un título de Copa que más tiempo lleva sin ganarlo (el Real Unión de Irún no lo consigue desde 1927). 37 años son demasiados para el que durante un largo tiempo fue el Rey de Copas. Ganó 13 de las primeras 23 ediciones que disputó antes de la Guerra Civil, y entre 1942 y 1958 jugó diez finales: ganó siete. Los leones se convirtieron en el único club de la historia en perder dos finales en menos de 15 días. Su rival volvió a ser el Barcelona, prolongando una maldición que no tiene visos de terminar.