Los Messi son campeones

Dicen que los niños vienen con un pan debajo del brazo, pero en el seno de los Messi Cuccitini parecen llegar con un balón en su lugar. De otra forma no se explica que el virtuosismo de Leo con el mismo no sea un caso aislado, ya que sus primos también se ganan la vida en los terrenos de juego. Y al parecer, lo hacen de forma convincente.

Este fin de semana, 'La Pulga' volvía a poner patas arriba el mundo del fútbol con una gran actuación en el Mundial de Clubes celebrado en Japón. En una nueva exhibición de fútbol del conjunto azulgrana, Leo anotó dos goles -el que abrió la lata y el que cerró la goleada- y se llevó por segunda vez el título de mejor jugador del torneo, tras el conseguido en 2009.

Una nueva hazaña que ya empieza a resultar normal. Lo que no es tan frecuente es que no fuera el único de la familia en levantar un título ese fin de semana. Su primo Maximiliano Biancucchi anotaba el primer gol en el encuentro que le dio al Olimpia de Asunción el torneo Clausura 2011, el primero del mítico club en más de una década.

Desde el año 2000, donde logró el título por delante del Guaraní, el Olimpia no había conseguido acabar entre los dos primeros hasta este año, donde tras finalizar el Apertura en segunda posición (por detrás del Nacional), han conquistado el Clausura, convirtiéndose además en los campeones honoríficos del total de 2011 y volviendo a clasificarse para disputar la Copa Libertadores, de la que es tres veces campeón (1979, 1990 y 2002).

Biancucchi, que llegó a Olimpia procedente del Cruz Azul mexicano, pasa así a formar parte de la leyenda del club más laureado de Paraguay, que acumula 39 títulos por los 28 del Cerro Porteño y los 15 del Libertad. Por si fuera poco, su hermano -y evidentemente primo de Leo- Emanuel Biancucchi también juega en la máxima división paraguaya, defendiendo los colores del Independiente de Campo Grande, tras haber pasado por el Munich 1860 alemán y el Girona español.