Eurocopa femenina 2022 | Inglaterra-España: Objetivo, hacer historia (21:00)

Era el cruce que se quería evitar, pero no hubo manera. Aunque España ganó dos partidos en una fase de grupos por primera vez en su historia, la derrota ante Alemania relegó a la Roja a un segundo puesto traicionero. Antes del torneo, Inglaterra fue colocada rápidamente en la terna de favoritas más por su condición de anfitriona que por su trayectoria o el nivel de sus futbolistas. Tras la fase de grupos y visto lo visto en el resto de candidatas, no hay duda de que las 'lionesses' se han ganado el apelativo de rivales a batir: pleno de triunfos y 14-0 en la diferencia anotadora, gracias sobre todo al 8-0 que le endosó a la Noruega de Hegerberg y Hansen. Además, el factor 'cancha' juega un papel muy importante en este caso, pues en cada partido están batiendo récords de asistencia.

Meses atrás el contexto habría sido muy diferente. España logró ganar a Inglaterra 0-1 en la She Belives Cup de 2019 gracias a un gol de Alexia Putellas en el 83', y en el último enfrentamiento en la Arnold Clark Cup, torneo celebrado en tierras británicas, las de Jorge Vilda empataron a cero con Athenea cuajando una actuación devastadora para la defensa rival y que le valió el MVP del partido y hasta del campeonato. La Roja había conseguido cambiar el curso de una dura historia de duelos previos, ya que Inglaterra dejó fuera de dos Mundiales a las nuestras (1997 y 2011) además de una Eurocopa (2009). Adriana Martín, mítica jugadora de la Selección ahora en el Espanyol, vivió en sus carnes dos de esas eliminaciones. "Cuando nos tocaban decíamos: ‘Joder, otra vez nos van a ganar’. Teníamos una tortura con ellas. Para nosotras eran imbatibles, y eso que nos poníamos por delante en el marcador o jugábamos mejor que ellas en algunos momentos… Hay equipos que se atragantan, e Inglaterra era nuestra espinita”. La última vez que se enfrentaron en un partido no amistoso fue en la anterior Eurocopa, la de 2017, en una fase de grupos donde España también perdió (2-0, Kirby y Taylor).

España estaba en todas las quinielas para luchar por su primera Eurocopa, pero la pérdida de jugadoras de la talla de Jenni Hermoso y Alexia Putellas, los casos de covid-19 que afectaron al grupo en la previa del torneo y la dura derrota ante Alemania (donde volvió a dar muestras de sufrir ante selecciones de entidad en un gran torneo) colocan a España un escalón por debajo de una Inglaterra que, pese a sus espectaculares números, nunca ha ganado una Eurocopa o un Mundial. Así que el favoritismo y la presión recaen en las pupilas de Sarina Wiegman, quien ya levantó el título hace cinco años con Países Bajos.

El escenario que vivirá España puede marcar un antes y un después en la carrera de muchas futbolistas de la Roja, sobre todo las jóvenes. Jugar en casa de una Inglaterra que está moviendo masas para luchar por estar en semifinales es algo difícil de superar. Una especie de final anticipada, una oportunidad para dejar impronta y demostrar el nivel que disfruta el fútbol español o, por contra, seguir a la sombra. La Selección no sabe lo que es ganar un partido de cuartos de final, pues la única vez que jugó unas semifinales fue en 1997 tras una fase de grupos, y ha caído frente a Noruega en 2013 (3-1) y ante Austria en 2017 (0-0, penaltis). Con la moral por las nubes tras el gol de Marta Cardona que dejó fuera a la subcampeona, llega el partido más temido en una noche que, para lo bueno o lo malo, nunca olvidarán.