Villarreal y Granada se juegan el liderato y la Real, el futuro

Villarreal y Maccabi de Tel Aviv se juegan la primera posición de su grupo en la Liga Europa ya que afrontan su partido con seis puntos tras haber logrado la victoria en los dos compromisos ya disputados y distanciados del Qarabag y el Sivasspor, que todavía no han sumado. El Villarreal afronta el encuentro con mayor responsabilidad que su rival por su condición de local, pero conscientes de que una victoria les acercaría mucho a la clasificación y con el convencimiento de que los buenos resultados de los últimos encuentros se convierten en un arma potente a su favor tras siete partidos sin perder.

Ese buen bagaje les ha hecho alcanzar las primeras plazas en la liga española y el liderato de la competición europea, con un especial protagonismo del equipo en casa, con cuatro victorias en los cinco encuentros de Liga disputados y el triunfo en Europa ante el Sivasspor. El técnico Unai Emery mantiene las bajas de Alberto Moreno, Dani Parejo, Juan Foyth y Francis Coquelin, todos ellos lesionados, pero más allá de todo ello, su idea es la de seguir con las rotaciones, por lo que jugadores como Sergio Asenjo, Mario Gaspar, Alfonso Pedraza, Moi Gómez o Paco Alcácer, entre otros, podrían descansar. Así, el once podría estar integrado por Gero Rulli como portero, con una defensa integrada por Rubén Peña, Raúl Albiol, Ramiro Funes Mori y Pervis Estupiñán. En el centro del campo Podrían jugar Iborra, Trigueros y Alex Baena o Jaume Costa; a los que se sumarán en ataque Samu Chukwueze, Take Kubo y Carlos Bacca.

El Maccabi viajó este miércoles con su plantilla al completo y su entrenador, Georgios Donis, podrá contar con cualquiera de sus jugadores: todos dieron negativo en los test de covid-19 realizados antes de viajar, y no cuenta con ninguna baja por lesiones, señalaron medios locales. El actual campeón de la Liga de Israel espera reforzar su posición en Europa tras un inicio de temporada más bien mediocre en el campeonato local. Con solo tres puntos recabados en los cuatro partidos disputados (tres empates y una derrota), ocupa la décima posición de la Ligat ha'Al, donde por ahora no conoce la victoria.

El entrenador de la Real Sociedad, Imanol Alguacil, afronta "con humildad y respeto" el partido de la fase de grupos de Liga Europa ante el líder, un AZ Alkmaar del que destacó su potencial ofensivo pero al que cree se le puede hacer sufrir en defensa. "Si perdemos este jueves las cosas se pondrán difíciles pero quedarán jornadas por jugar. Veremos de lo que somos capaces porque estamos bien", anunció Alguacil en la previa de este compromiso en la sala de prensa de Anoeta.

Desveló que Asier Illarramendi no podrá entrar en la convocatoria porque ha vuelto a sufrir un parón en su recuperación y, sobre el gran momento de su plantilla, sorprendió al decir que ante el Celta (1-4) no jugó tan bien como se han destacado en algunos medios. "Ante el Nápoles, y a pesar de la derrota, la Real hizo un partidazo y a mí me gustó más que ante el Celta, pero uno se perdió y el otro se ganó", asumió un técnico txuri urdin que no ve al vestuario influenciado negativamente por el liderato de la liga y sí "con los pies en el suelo". El centrocampista Mikel Merino también se pronunció sobre un encuentro "vital", que la Real afronta "sin presión porque es de esos que gusta jugar a todos", y aseguró que los donostiarras llegan "en un buen momento, encadenando partidos de nivel en las últimas jornadas". "Si les ganamos daremos un pase importante en la clasificación y si lo perdemos todavía tenemos opciones para poder meternos. Ojalá podamos parecernos a lo que estamos siendo hasta ahora", resumió el futbolista navarro.

El preparador físico del Granada, Víctor Lafuente, aseguró en vísperas del partido de la Liga Europa ante el Omonia en Chipre que la plantilla encara con "energía positiva y mucha fuerza mental" la cita, pese a las bajas de su entrenador, tres de sus ayudantes y dos jugadores.

Lafuente afirmó este miércoles, en la rueda de prensa oficial previa al choque, que afrontan "con normalidad y serenidad" la ausencia en el partido en Nicosia del entrenador Diego Martínez, que no ha viajado tras dar un resultado no concluyente de COVID-19 en los test médicos.

"No puedo sentirme contento ni feliz porque cuatro compañeros (miembros del equipo técnico) y dos jugadores (Jesús Vallejo y Roberto Soldado) se han quedado en casa, pero tenemos la plena confianza del entrenador, del equipo técnico y de los jugadores", dijo el preparador físico del Granada.

Recalcó que cuentan con "una gran energía positiva y mucha fuerza mental" tanto él como Jesús Roche y Álvaro García, que son los tres únicos miembros del cuerpo técnico que se han podido desplazar a Chipre y que serán los que dirijan al Granada este jueves ante el Omonia Nicosia.