Juegos Olímpicos Tokio 2020, fútbol | Los miércoles de Antonio Sanz: RAFA MIR REVIENTA EL FALSO ‘9’

Antes, Rafa Mir marcó un triplete que hizo variar a Luis de la Fuente en su firme principio de jugar sin delantero centro.

La prórroga resolvió una semifinal que se encaminaba irremediablemente a los penaltis. El seleccionador, por primera vez en el torneo, había renunciado a la idea de jugar con falso ‘9’. Esta vez, el rendimiento de Rafa Mir en los cuartos de final frente a Costa de Marfil desencadenó la modificación en la alineación inicial. El sacrificado resultó ser Asensio, quien a la postre resolvió el partido. Pero es que el delantero cartagenero había sacado petróleo unos días antes nada más pisar el césped con un tanto in extremis que forzó el tiempo extraordinario. En ese tramo del choque, se sacudió dos goles más y España pudo participar del duelo frente a Japón. Los aplausos se ceban con un grupo de futbolistas que ha hecho historia y que peleará por colgarse una segunda medalla de oro casi treinta años después.

Un delantero espigado, poco reconocido, con escaso pedigrí internacional, se ha convertido en la nueva estrella de la España olímpica. Un auténtico trotamundos del balompié que a los 24 años afronta un mercado que cambiará su vida. Propiedad del Wolverhampton inglés, saldrá con seguridad de una entidad donde apenas le han concedido oportunidades. Cesión tras cesión y equipo tras equipo se cuantifican para completar una formación que ahora puede conducirlo a un grande de LaLiga. Ese recorrido inhóspito, finiquitado con éxito, ha provocado que Atlético de Madrid o Sevilla se plateen la opción de ficharlo. La guinda de los Juegos y la noche de Costa de Marfil han ubicado a Mir en una posición de privilegio. Los ingleses habitan condenados a vender porque el ariete penetra en el último año de contrato. Y aunque el desembolso realizado en su día fue escaso -dos millones de euros-, es el momento de sacar tajada por un futbolista que no seduce en la Premier League.

Rafa Mir, hijo de futbolista, nació cuando su padre militaba en el Cartagena. Arrancó el deporte siendo un depredador en el fútbol sala murciano para dar paso, a los doce años, a su primera aventura: se trasladó a jugar en la cantera del Barça. En La Masía vivió dos cursos previos a no encajar y regresar a Murcia. Un año más tarde optó por seguir creciendo en el Valencia CF. Con quince años volvió a abandonar el hogar familiar para destacar en Mestalla. Los goles se le caían de los bolsillos y las etapas las rebasaba con destreza. Sin embargo, y tras debutar en el primer equipo, el desencuentro para renovar el contrato acabó por expulsarlo del primer vestuario y de la entidad, que consideró que la mejor opción, ante la rebeldía, era vender al joven antes de concluir el vínculo que expiraba en pocos meses. Precisamente, el mismo entrenador que le dio la alternativa en Valencia fue quien apostó por él. Nuno, no obstante, le concedió escasos minutos en Wolverhampton, por lo que se consideró obligado a encadenar un club tras otro. Así acabó en la UD Las Palmas, Nottingham Forest y SD Huesca, donde explotó y se consagró como un goleador regular.

En el club oscense colaboró para ascender a Primera y espabiló en la máxima categoría, tras dieciocho meses de buen rendimiento con los azulgranas. Tal es el confort adquirido que Simeone y Lopetegui han aceptado de buen grado las propuestas planteadas por Berta y Monchi. Y aquí arranca el pulso entre dos aspirantes a la pelea por el campeonato. El Cholo considera que es una buena alternativa para Suárez, una vez comprendido que el sueldo de Griezmann es inalcanzable para la economía rojiblanca. Mientras, el Sevilla de Julen observa apropiado firmar a Rafa Mir como alternativa a De Jong, o bien para reemplazar al neerlandés. También los dos clubes han sondeado al delantero del Deportivo Alavés, Joselu, pero la opción del goleador olímpico es más factible, pese a que Mir ha logrado cuadruplicar su valoración en este fútbol posterior a la pandemia. La estimación del precio solicitado por los ingleses se encamina a los doce millones de euros.

De la Fuente debe replantearse si, para medirse a Brasil, mantiene a Rafa Mir en el once inicial o decide premiar a Marco Asensio por su gol en semifinales. El gusto del seleccionador olímpico es claro y solo los tres goles anotados por el ariete de Cartagena obligaron a rectificar el plan perpetuo. El debate se sirve con la intención de conocer si volverá al origen o mantendrá a una España más ofensiva con Rafa sobre el césped. El máximo goleador nacional del torneo ofreció más profundidad al ataque español, al tiempo que fijó con destreza a los centrales nipones. Se ha comprobado que un ‘9’ es necesario para liberar a aquellos delanteros que acosan y se mueven por los costados y que afrontan el partido con una referencia situada en el eje del ataque. Sin embargo, todo apunta a que el técnico riojano volverá a su sistema de seguridad, que no es otro que la vuelta de Mir al banquillo. Todo sea por colgarse la medalla de oro.