LaLiga, Athletic Club-Real Madrid: Sin pólvora, sin juego y sin cabeza (0-0)

0 - Athletic Club: Kepa; De Marcos (Lekue, m.72), Unai Núñez, Etxeita, Balenziaga; Williams (Córdoba, m.82), Iturraspe (San José, m.39), Mikel Rico, Susaeta; Raúl García y Aduriz.

0 - Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Kroos, Modric, Isco (Kovacic, m.82); Cristiano Ronaldo, Benzema (Mayoral, m.82).

Árbitro: Mateu Lahoz (comité valenciano). Expulsó a Ramos, en el minuto 86, por doble amonestación. En ambos casos, en el 11 y el 86, por utilizar los codos ante Aduriz. Además, mostró tarjeta amarilla a los locales De Marcos (m.44) y Etxeita (m.56), y a los visitantes Casemiro (m.73), Carvajal (m.91) y Cristiano Ronaldo (m.92).

Incidencias: Partido correspondiente a la decimocuarta jornada de Primera División disputado en San Mamés ante 44.884 espectadores, según datos oficiales. Varios centenares de ellos seguidores blancos. Hizo el saque de honor el pelotari guipuzcoano Jokin Altuna 'Altuna III', recientemente proclamado campeón del Cuatro y Medio y seguidor del equipo bilbaíno.

Kepa. Muy seguro durante todo el encuentro. Pese a que no tuvo que hacer intervenciones de verdadero mérito, siempre estuvo bien colocado y atento en las salidas. Nunca le pillaron desprevenido.

Cristiano Ronaldo. Otra vez remató una y mil veces. Y otra vez, las falló todas. No está fino el portugués (al menos en Liga) y su falta de pegada está penalizando al Madrid.

Sergio Ramos. En pleno aluvión madridista contra la portería de Kepa, Ramos volvió a cometer un error de novato siendo expulsado por dos acciones prácticamente idénticas.

El Real Madrid dejó pasar un tren importante por la Liga en San Mamés. Con el inesperado pinchazo del Barça ante el Celta, los blancos debían ganar a un Athletic en horas bajas para reengancharse a la lucha por el título. Ni siquiera consiguieron marcar.

El cuadro de Zidane jugó con más corazón que cabeza y con más alma que fútbol. Intensidad máxima desde el primer minuto, pero ninguna idea en los metros finales. Hasta Isco estuvo encorsetado. El Madrid se entregó al balón al área, donde Cristiano trató de imponerse. Una vez más, no lo consiguió. Sus cabezazos, por línea de fondo o a las manos de Kepa. Sus disparos, contra la defensa del Athletic o al palo. Tanto él como Benzema se toparon con la madera. El equipo del Cuco, que apenas probó a Keylor, pasó los 90 minutos agazapado, lejos del nivel propuesto en otros años. Le valió para sumar un punto ante el vigente campeón.

Al despropósito se sumó Zidane, que lejos de reaccionar hizo los cambios a partir del minuto 82. El Madrid acabó asediando el área del Athletic, pero incapaz de tirar entre los tres palos. Incapaz de marcar, como en el Wanda Metropolitano o en casa ante el Betis. Sin pólvora, sin juego y sin cabeza es difícil ganar una Liga.