LaLiga, Atlético-Getafe: Motivos para la ilusión (1-0)

Atlético: Oblak; Trippier, Savic, Giménez, Lodi; Koke, Saúl, Thomas (Hermoso, 62'), Lemar (Vitolo, 73'); João Félix (Llorente, 66') y Morata

Getafe: Soria; Nyom, Bruno, Djené, Cabrera (Raúl, 46'); Damián (Ángel, 64'), Arambarri, Fajr, Cucurella; Molina y Mata (Gallego, 80')

Goles: 1-0, Morata (23’)

Árbitro: Cuadra Fernández. Amonestó a Cabrera, Fajr, Nyom, Saúl y Ángel. Expulsó a Molina (roja directa) y Lodi (doble amonestación).

Estadio: Metropolitano.

Álvaro Morata: Tras una pretemporada en la que todos los titulares se los ha llevado João Félix, Morata aprovechó el debut de la competición oficial para reivindicarse con uno de los recursos que mejor domina: el remate de cabeza. La buena colocación del delantero rojiblanco es un filón para Trippier, que demostró que no se le había olvidado cómo enviar los centros que maravillaron al mundo durante el Mundial de Rusia.

Jorge Molina: Pagó la novatada de la nueva norma arbitral después de Modric. Se cruzó en el camino de Thomas sin intención de dañar al centrocampista ghanés, pero lo pisó en el talón y el VAR lo terminó de condenar: roja directa sin piedad ante sus explicaciones.

Renan Lodi: Debut amargo el del brasileño ante su nueva afición. Recibió dos amarillas en un solo minuto, la segunda evitable por su parte más allá de la rigurosidad del colegiado, y dejó al Atlético con un defensor menos durante más de 45 minutos, algo que no es del gusto de Diego Simeone, que tuvo que retrasar a Saúl.

El Metropolitano lució sus mejores galas para dar la bienvenida al Atlético en la nueva temporada. La renovación que ha vivido el equipo de Diego Simeone durante el verano ha renovado el optimismo de la fiel hinchada rojiblanca y respondió con un lleno para empezar frente al Getafe. El equipo de José Bordalás, que este año tendrá que compaginar LaLiga con Europa, no llegó para ponerle nada fácil al Atlético, y desde el momento en el que Cuadra Fernández señaló el inicio del partido se vio la intensidad en amos bandos.

Las faltas y las interrupciones fueron la tónica dominante durante los primeros minutos, guerra de nervios que terminó ganando el Atlético con el gol de Morata en el 23’. Hasta ese momento apenas había habido exigencias para Soria u Oblak. Trippier demostró que es uno de los laterales que mejor centra en la actualidad, y en su segundo intento encontró la cabeza de Morata, que le ganó la posición a un tótem como Djené para que el Metropolitano pusiera a prueba sus cuerdas vocales con el primer gol del curso.

Lejos de venirse abajo, el Getafe empezó a obtener jugadas peligrosas a balón parado, aunque el Atlético las defendió con la solvencia habitual. En el repliegue defensivo de una de éstas llegó la primera polémica del partido, con la roja directa a Molina tras cruzarse en el camino de Thomas y pisarle el talón. La nueva normativa no deja lugar a dudas, y ya lo sufrió Modric el día anterior: roja directa. Cuadra Fernández fue asistido por el VAR y expulsó al veterano delantero, que juraba y perjuraba que no había habido intención en el cruce fortuito.

No fue una ventaja numérica que durara mucho, pues Lodi recibió en el lapso de un minuto dos amonestaciones: la primera por un agarrón evidente y la segunda por un manotazo sobre Damián. De nuevo se enfrentaban dos equipos en paridad, por mucho que Diego Simeone protestara al cuarto árbitro en la banda al considerar que fueron demasiado rigurosos con el brasileño, que dejó el sabor amargo en la parroquia local en su debut.

João Félix mostró las mismas ganas mostradas durante la pretemporada, pero el Getafe le dio una bienvenida áspera a LaLiga, con un marcaje pegajoso por parte de sus defensas y más de una patada que sirviera como advertencia. Lejos de achicarse, el joven talento portugués siguió intentándolo y un eslalon maravilloso terminó con un claro derribo en el área. No había duda sobre el penalti, aunque Morata no pudo convertirlo al hacerse gigante Soria bajo palos con una gran intervención.

Tras el fallo de penalti el Atlético decidió meter el partido en la nevera, haciendo que bajara el ritmo de las acciones y defendiendo con comodidad las tímidas acometidas del Getafe, que no tiró entre palos hasta el minuto 86, cuando Ángel se sacó de la manga un zurdazo que repelió violentamente el larguero de Oblak. Pasado el susto y las revoluciones, los rojiblancos llevaron a buen puerto el partido hasta el minuto 90 para asegurar los tres primeros puntos de un duro debut en el que hay motivos para ilusionarse con una Liga prometedora para el Atlético.