La ausencia en la selección, el toque de atención definitivo para Hermoso

El panorama parecía más que alentador para Mario Hermoso al final de la pasada temporada. Dos temporadas a muy alto nivel en el Espanyol lo llevaron no sólo a ser convocado por la selección española con Luis Enrique Martínez aún al frente de la misma, sino también a fichar por el Atlético para ocupar la posición dejada por el emblemático Diego Godín.

Hermoso se perfilaba como un jugador importante en el nuevo proyecto de Diego Simeone, posiblemente el más revolucionario desde que está al frente del equipo del Wanda, pero la realidad competitiva ha ido dejando a Hermoso orillado poco a poco. Savic y Giménez se han posicionado como la pareja de centrales titular dado su mayor grado de compenetración trabajado en años anteriores, pero el brasileño Felipe también lo ha adelantado en las preferencias del Cholo.

Esta situación actual tuvo su reflejo en la última convocatoria de la selección española, en la que Robert Moreno decidió prescindir de sus servicios y convocar por primera vez a Pau Torres, central emergente del Villarreal que venía apretando desde las inferiores de la Roja. El hecho de no acudir a la concentración de Las Rozas para los partidos en Suecia y Noruega pueden suponer un acicate para volver a ver la mejor versión de Hermoso sobre el terreno de juego, una que convenza a Diego Simeone de que tiene en sus botas y en su colocación la misma capacidad defensiva que los caciques Savic y Giménez. Llegó la hora de despertar para el exespanyolista.