La hora de las canteras: ¿Quién está mejor preparado en LaLiga?

El reinicio de la Bundesliga ha servido como primera toma de contacto con lo que será el fútbol poscoronavirus para terminar de urgencia una temporada 2019/20 en la que los planes de todos los clubes han saltado por los aires a sólo dos meses de su finalización. Las cinco sustituciones y la inevitable precariedad de la condición física de muchos futbolistas que han tenido que entrenarse sin balón en sus hogares (18 lesiones musculares se contaron en Alemania en las semanas previas a la reanudación y 12 más en la primera jornada de la Bundesliga) han hecho que los ojos se posen sobre la situación en la que se encuentran las canteras de los principales equipos. La profundidad de las primeras plantillas puede no ser suficiente para alcanzar los objetivos deportivos fijados a principios de temporada.

El actual líder de LaLiga, el Barcelona, puede ser uno de los más perjudicados en el corto plazo. La plantilla que dirige Quique Setién nunca se ha caracterizado por su amplitud, y las lesiones han sido una constante desde que comenzara el curso aún con Ernesto Valverde en el banquillo, pero a esto se suma la situación de su filial, que aún tendrá que retomar la competición.

El Barcelona B se encuentra en el Grupo III de Segunda B, y aunque la liga regular no se reanudará, el equipo estaba en zona de playoffs de ascenso a Segunda, por lo que sí tendrá aún partidos oficiales en el horizonte. Esto ha hecho que el Barcelona haya decidido que Ansu Fati refuerce al filial, lo que podría restarle cierto protagonismo con el primer equipo, en el que ya ha dejado grandes sensaciones e incluso el récord de ser el goleador más joven de la Champions League.

La presencia de canteranos en el Camp Nou se ha ido diluyendo con el paso de los años, hasta el punto de que Sergi Roberto, de 28 años, es el último producto de La Masia plenamente asentado en el primer equipo. Los fichajes de jugadores foráneos para reforzar el filial sin un sentido de pertenencia claro a la filosofía azulgrana han jugado en contra de una institución que vivió su época dorada cuando, en la etapa de Tito Vilanova, el Barcelona alineó a once jugadores formados en las inferiores en noviembre de 2012 contra el Levante.

Esta temporada, Carles Pérez irrumpió, pero fue rápidamente traspasado a la Roma para ayudar a aliviar la maltrecha economía del club, y el central uruguayo Araújo sufre para hacerse un hueco en las convocatorias. Riqui Puig encarna el deseo del aficionado de volver a ver un canterano triunfando con el primer equipo, pero después de un par de actuaciones en el inicio de la era Setién ha vuelto a pasar a un segundo plano. Con el Barça B jugándose un ascenso que es visto con interés en los despachos del club, parece difícil que en esta recta final exprés de temporada vayan a tener un peso especial. De cara al futuro, y ante las dificultades económicas que ya se hacen notar en Can Barça, la posibilidad de repescar antiguos canteranos gana muchos enteros, siendo Eric García, hoy en el Manchester City, uno de los más interesantes.

En la misma situación se encuentra el filial del Atlético, clasificado en la tercera posición del Grupo I y con opciones de aterrizar en Segunda en la temporada 2020/21. Diego Simeone es un adalid de la competitividad máxima, y hacerse un hueco en los planes del primer equipo es una tarea harto complicada. Desde 2015, año en el que debutó Thomas Partey, ningún otro canterano ha podido consolidarse y seguir la estela de una cantera hoy representada en la élite por el propio ghanés, Thomas y Koke. Rodrigo Riquelme parece el mejor situado para intentar romper un techo de cristal que se le ha resistido a jugadores de la talla del hoy sevillista Óliver Torres.

Esta temporada han debutado con la camiseta rojiblanca Riquelme, Poveda, Sánchez, Valera y Clemente, pero no han pasado de un protagonismo residual, mucho mayor en pretemporada que en competiciones oficiales. El hecho de que haya un playoff de ascenso a la vuelta de la esquina tampoco hace factible pensar en una presencia masiva de los atléticos del futuro en las últimas semanas de competición. A su favor juega el hecho de que el Atlético sigue vivo en Champions tras eliminar al Liverpool, por lo que Diego Simeone podría valerse de la nueva norma de los cinco cambios para evitar cargar más de lo debido a una plantilla cuyo once titular suele recitarse casi de memoria por parte del aficionado.

Distinto es el caso del Real Madrid. El Castilla terminó la temporada regular en Segunda B en el séptimo lugar y aunque su cantera siempre ha gozado de buena salud y representación en muchos equipos de Primera, otra historia distinta es la de asentarse en el primer equipo. Quienes están en mejor disposición de tener minutos son Rodrygo y Reinier. El primero ha tenido muchísimo más vuelo en el primer equipo (18 partidos) que en el filial (tan sólo tres), y forma parte de la nueva política de fichajes del Real Madrid en Brasil liderada por Juni Calafat, en la que también se enmarcan Vinícius -ya asentado en el Bernabéu- y el propio Reinier.

En lo que respecta a los jugadores españoles, César Gelabert es una de las grandes promesas del fútbol nacional, pero esta temporada se ha visto lastrado por las lesiones y aún no ha debutado con el primer equipo. Antonio Blanco y Fran García son otros jugadores en disposición de poder irrumpir en Primera más pronto que tarde, pero sus posiciones -centrocampista y lateral izquierdo, respectivamente- están bien cubiertas en el Real Madrid.

En la Youth League, la Champions juvenil, el Zaragoza dio la sorpresa al llegar hasta los playoffs previos a los octavos de final. Los maños entraron a través de la ruta doméstica, lo que le permitió codearse con otros campeones nacionales. Atlético y Real Madrid sí alcanzaron los octavos, con los rojiblancos cayendo en penaltis ante el Ajax. Los blancos tienen pendiente su eliminatoria contra la Juventus, aunque resulta complicado dilucidar si la UEFA retomará esta competición o la cancelará definitivamente.

Otra buena muestra para comprobar la salud de las canteras españolas está en la División de Honor Juvenil, que también se ha visto suspendida a causa de la pandemia de coronavirus. Celta, Athletic, Barcelona, Sevilla, Real Madrid, Las Palmas (con su primer equipo en Segunda) y Villarreal lideraban cada uno de los siete grupos que la conforman. Los vigueses han llegado a solicitar a la UEFA una plaza en la próxima Youth League para premiar su gran temporada. Esta clasificación puede llegar a suponer un alivio de cara al futuro, ya que los próximos mercados de fichajes son toda una incógnita. Con las economías de los clubes puestas a prueba y una crisis que nadie se atreve a aventurar cuándo podrá finalizar, tener una cantera a pleno rendimiento puede convertirse en la salvación de los clubes… e incluso de la selección, ya que la apuesta por el producto nacional será mucho más visible a partir de la próxima temporada.