La Liga, Atlético-Osasuna: Reenganchados a Europa (2-0)

Atlético: Oblak; Trippier, Felipe, Giménez, Sánchez (Herrera, 63’); Koke, Thomas, Saúl, Lemar (Correa, 54’); João Félix (Hermoso, 82’) y Morata

Osasuna: Herrera; Roncaglia, Navas, David García, Estupiñán; Mérida (Pérez, 79’), Oier (Ibáñez, 73’), Darko; Torres (Adrián, 73’), Ávila y Rubén García

Goles: 1-0, Morata (67’); 2-0, Saúl (75’)

Árbitro: Munuera Montero. Amonestó a Sánchez.

Estadio: Wanda Metropolitano. 46 033 espectadores.

Álvaro Morata. Reaccionó con rabia después de abrir la lata ya avanzada la segunda mitad. El ‘9’ rojiblanco lo intenta y pelea constantemente con todos los centrales que se encuentra en cada partido, pero no siempre se muestra acertado. Su celebración llena de rabia tras casi 500 minutos sin marcar demuestra que él es el primer interesado en que el Atlético no tenga tantos problemas de cara al gol; su definición, que es uno de los mejores delanteros del país.

Sergio Herrera. El meta suplente de Osasuna aprovechó un escenario como el Wanda para mostrarse al mundo y lo hizo a lo grande. Su recital de paradas en la primera parte podría poner en un aprieto la titularidad de Rubén cuando vuelva a estar disponible.

Manu Sánchez. Ante la ausencia de Lodi, Diego Simeone se vio obligado a echar mano del filial y Sánchez no desentonó. En pretemporada mostró buenas maneras, y ante un rival correoso como Rubén García, demostró ser una opción válida para el Cholo durante el resto de la temporada.

El clímax alcanzado con la clasificación del Atlético para octavos de la Champions League tras una fase de grupos más compleja de lo esperado dejó algo frío al Wanda, quizá deseoso de que comience ya el año próximo con renovadas ilusiones de cara a la Supercopa y a las eliminatorias en Europa, teniendo en cuenta que LaLiga es un objetivo demasiado lejano para todos, empezando por el propio entrenador.

A pesar de la presunta frialdad, Atlético y Osasuna regalaron una primera parte plagada de oportunidades en ambas porterías. Los rojillos salieron sin complejos en casa ajena y hurgaron en las debilidades de una defensa a la que se reincorporó Giménez junto al canterano Sánchez, ocupando la ausencia de Lodi. La sorpresa llegó por el otro lado, donde Estupiñán puso en más de un aprieto a Trippier, aunque ni Rubén García ni Darko consiguieron inaugurar el marcador.

Con el paso de los minutos el Atlético se serenó y empezó a buscar la meta de Herrera, tercer portero del equipo pamplonica, que se convirtió en un gigante y un serio opositor para pelearle el puesto a Rubén. Lemar, Saúl, João Félix y Thomas se toparon con un muro inesperado que dejó el 0-0 al descanso y la sensación de que el duelo se podía complicar igual que lo hizo una semana atrás el del Villarreal.

La segunda parte comenzó con ese mismo riesgo de empate latente. Diego Simeone movió el banquillo dando entrada a Correa y Herrera, pero no encontraba el camino hacia el gol. El desatasco llegó en el 67’, a balón parado, una de las suertes que mejor domina el Atlético, y lo hizo por medio de Morata, que remató con autoridad un córner. Celebró con rabia el ‘9’ rojiblanco, consciente de que el escrutinio sobre su figura es intenso y siempre demanda más de él.

Con el partido definitivamente cuesta abajo, el Atlético pudo tener una recta final tranquila e incluso lúcida, con la combinación entre Correa y Saúl que terminó en el 2-0 como mejor reflejo de lo que el equipo es capaz de hacer cuando está desencadenado y desprovisto de presiones. El Atlético consigue completar una semana ideal en casa y vuelve a sonreír.

5’. Darko prueba fortuna con un disparo escorado que detiene Oblak con ayuda del palo.

39’. Paradón de Herrera tras un cabezazo sensacional de João Félix.

48’. Error increíble de Ávila que tenía toda la portería a favor, pero su disparo salió rechazado.

67’. El Atlético se adelanta en el marcador gracias a un cabezazo de Morata en un córner.

75’. Saúl se asocia con Correa para quedarse solo ante Herrera y poner el 2-0.