LaLiga, Mallorca-Barcelona: El ímpetu de un líder hambriento (0-4)

0 – Mallorca: Reina; Sastre (Gámez, 46’) Raíllo, Valjent, Pozo; Take, Pedraza (Baba, 57’), Sevilla (Salibur, 84'), Rodríguez; Budimir (Abdón, 84') y Hernández (Lago, 46’)

4 – Barcelona: Ter Stegen; Roberto (Semedo, 71’), Piqué, Araújo, Alba; Vidal (Rakitic, 46’), Sergio (Arthur, 71’), De Jong (Júnior, 84'); Braithwaite, Messi y Griezmann (Suárez, 57’)

Goles: 0-1, Vidal (2’); 0-2, Braithwaite (37’); 0-3, Alba (79’); 0-4, Messi (90'+3')

Árbitro: Del Cerro Grande (Comité madrileño). Amonestó a Vidal, Alba y Rodríguez.

Estadio: Visit Mallorca.

El hambre es un sentimiento muy difícil de disimular, y en cuestión de fútbol pocos jugadores tienen mayor apetito que Arturo Vidal, permanentemente bien colocado. El chileno, sumido por defecto en la rumorología que lo sitúa lejos del Camp Nou, se reencontró con LaLiga a lo grande, adelantando al Barcelona en el segundo minuto de partido. El robo de De Jong en tres cuartos y el centro de Alba bien merecían un cabezazo a la altura, y el Rey Arturo no perdonó a Reina.

El empuje inicial del Barcelona se fue enfriando poco a poco, como si Messi y compañía se hubiesen dado cuenta de que tenían que regular esfuerzos. Aprovechó entonces el Mallorca para sacudirse el susto inicial y empezar a mostrar a Take con todo su desparpajo por la banda derecha. El japonés tuvo un par de ocasiones dignas, pero la pausa de hidratación echó por tierra todo el buen trabajo bermellón y Braithwaite castigó en la reanudación a los de Vicente Moreno. El danés se estrenó con la camiseta del Barcelona, demostrando que su adaptación sigue por buen camino.

Con una ventaja tan cómoda y la posibilidad de cinco cambios por delante, todo hacía pensar que se vería una segunda parte tranquila y anodina en el Visit Mallorca. Nada más lejos de la realidad. Por increíble que parezca, un espontáneo consiguió burlar todos los filtros de vigilancia en un partido a puerta cerrada en pleno estado de alarma nacional. Lo que en cualquier otro momento no pasaría de una gamberrada, en la situación actual entraña un riesgo para todos los protagonistas que seguro que preocupa en los despachos de LaLiga.

El carrusel de sustituciones fue llegando al mismo tiempo que el cansancio en la primera toma de contacto con un partido oficial para ambos. Braithwaite pudo poner tierra de por medio y el Mallorca intentaba acercarse más por empuje que por fútbol, sumando más de una ocasión digna de gol. Volvió también Suárez y pugnó con los zagueros bermellones para demostrar su garra charrúa, pero su readaptación física aún tendrá que madurar durante las próximas semanas. Mientras tanto, sin que diera la sensación de que estuviera haciendo un gran partido, Messi se marchó con un gol y dos asistencias. El líder sigue en lo alto y Messi sigue estando a años luz del resto, la vida sigue igual.

Del Cerro Grande consultó con el asistente del VAR si hubo mano de Griezmann en la acción del gol de Braithwaite, pero no apreciaron ninguna ilegalidad en la repetición. El 0-3 de Alba también tuvo que ser revisado ante lo ajustado del pase en profundidad de Messi, pero el lateral también estaba en posición correcta, por lo que no hubo decisión que revirtiera el gol.