¿Ayudó el VAR a Madrid y Barça? Explicación a las dos grandes polémicas de la jornada

De esta manera mostraba su descontento Unai Emery en sala de prensa tras acabar el Villarreal (1-3) Barcelona. La jugada en cuestión que indignó al técnico de Irún se produjo al inicio del partido, en el minuto 6. Eric García se equivocaba en un pase que dejaba completamente solo a Danjuma frente a Ter Stegen en la frontal del área. El neerlandés tardó en disparar y su tiro se topó con un Gerard Piqué que se lanzó al suelo para evitar que la pelota entrase en portería, golpeando el balón con en su brazo derecho. Soto Grado, árbitro principal, no señaló penalti y Munuera Montero, en el VAR, no avisó a su compañero del error que acababa de cometer.

Y es que, tal y como el Comité Técnico de Árbitros se encargó de aclarar el pasado 2 de marzo, que la acción de Piqué estaría en el apartado de manos sancionables, ya que estaba en una posición no natural al entender que ocupa un espacio mayor, que su cuerpo se hizo más grande, y, sobre todo, porque tuvo como consecuencia evitar un disparo. También aclaró el estamento arbitral que se señalará mano siempre que el jugador "tenga opciones de evitar la mano", haya una distancia considerable entre el adversario y la mano y se tendrá en cuenta la velocidad del balón y el riesgo del jugador contra las consecuencias de su acción.

Conclusión: Doble error arbitral. El del árbitro por no señalar penalti y el del colegiado del VAR por no recomendarle volver a ver la jugada en la pantalla.

Igual de enfadado que el Villarreal se fue el Sevilla del Santiago Bernabéu. Monchi, al acabar el partido, se mostró resignado ante otra jugada dudosa en el área madridista no señalada a favor de los sevillistas. La polémica en cuestión llegó pocos minutos después de que Benzema empatara el partido a uno. En el minuto 36, Ocampos reclamó un penalti por derribo de Alaba en el área.

Sánchez Martínez, el árbitro del partido y que seguía muy cerca la jugada, no señaló la acción como penalti y su colega del VAR, De Burgos Bengoetxea, tampoco le llamó para que la revisara. Erró el árbitro principal puesto que el contacto fue suficiente para señalar penalti.

Conclusión: Al contrario que la jugada de Piqué, en esta jugada del VAR hizo bien en no entrar, ya que el árbitro principal apreció el contacto de Alaba sobre Ocampos y no lo consideró suficiente para señalar penalti. La jugada fue arbitrada desde el campo y la repetición en las distintas tomas de televisión no mostraron nada diferente de la interpretación arbitral.