La cara y cruz del Barcelona de Tito

El Barça es un sólido líder en Liga y Champions donde Leo Messi sigue dando muestra de estar al máximo nivel, aunque esta temporada el Barça tiene un lunar negro, los goles encajados. Si Messi está a cuatro goles de superar el espléndido récord de Pelé de dianas convertidas en una sola temporada (75), el argentino también se está destapando como un jugador generoso capaz de haber repartido 24 asistencias en 2012. Por ponerlo en comparación con otro gran jugador como Cristiano, el madridista solo acumula siete en lo que va de año.

Pero no solo Messi ha arrancado la temporada en plan estrella, si no que en su conjunto el Barça es el máximo goleador de la Liga (24 tantos en ocho encuentros) con buenos complementos como Cesc o Pedro.

Pero este Barça de Tito tiene un gran diferencia con respecto al de Guardiola, y es que han encajado once goles en estas primeras ocho jornadas lo que le convierte en un equipo frágil en la zona defensiva.

Esto afecta directamente a Víctor Valdés, que en las últimas campañas logró el Zamora al portero menos goleado y que ha tenido que recoger once veces el balón de dentro de su portería. Hasta ocho equipos de Primera han encajado menos goles que el líder, siendo Málaga y Mallorca, buenos ejemplos de eficacia defensiva con cinco y seis goles encajados respectivamente. Hace diez temporadas que el Barça no tenía un bagaje defensivo tan malo, en la temporada en que Van Gaal arrancó con idéntica cifra de goles recibidos en estas jornadas.

Por eso la pregunta es clara. ¿Apuesta Tito por la teoría de Cruyff de que en el fútbol basta con marcar un gol más que tu oponente aunque encajes muchos goles? ¿O es más bien fruto de las numerosas bajas en defensa que acumula el Barça en las primeras jornadas? Lo que está claro, es que es un aspecto a mejorar, pero que mientras juegue Messi, no hay rival que se resista.