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Lo que hemos aprendido del Deportivo-Real Madrid

Adrián G. Roca

Actualizado 15/05/2016 a las 10:49 GMT

El Real Madrid no pudo proclamarse campeón de Liga pese a que cumplió su parte del trato ganandon al Deportivo. Cristiano Ronaldo tampoco pudo ganar la Bota de Oro ni el Pichichi, y encima se retiró lesionado. Al menos, Zidane y su equipo se llevan la satisfacción de haber luchado hasta el final.

Sergio Ramos se lamenta tras perder la Liga

Fuente de la imagen: EFE

Cristiano, 50 goles marcados por sexta temporada consecutiva. El delantero portugués volvió a mostrarse insaciable y quiso Liga, Pichichi y Bota de Oro pese a que tenía que marcar al menos cinco goles para superar a Luis Suárez antes de iniciar la última jornada. Marcó dos, y volvió a superar el medio centenar de tantos desde que es jugador del Real Madrid.
Parecía que iba a llegar a tope a Milán, pero se marchó con molestias. Eso sí, el madridismo estará preocupado porque Ronaldo se retiró en el descanso tras un pisotón. El club dijo que fue por precaución, pero ¿y si realmente está lesionado?
El Real Madrid de Zidane cree en sí mismo. El Barcelona ganó la Liga, pero Zinedine Zidane ha empezado a ganarse respeto como entrenador del Real Madrid. Los jugadores están con él y creen en su método. Falta definir un sistema de juego, una plantilla más y mejor elaborada, pero tras la destitución de Benítez, los blancos han creído en algo y casi se llevan un título que tenían prácticamente perdido.
Toni Kroos hace olvidar la magia de Özil. El alemán está ‘on fire’ en los últimos partidos, ha recuperado su mejor versión y con una asistencia en Riazor llegó a las diez en estas Ligas. Tantas como dio el mejor Mesut Özil.
Ojo, el Barça va camino de un ‘sorpasso’ real. Esta palabra se ha puesto de moda en la política española, en caso de que Podemos adelante al PSOE en las próximas elecciones. En el fútbol, el Barcelona también va camino de adelantar al Real Madrid en títulos como continúe esta tendencia en el campeonato doméstido: 24 contra 32. Parece lejano, pero no imposible.
Las lágrimas de Marcelo, puro madridismo. El lateral brasileño y uno de los capitanes del Real Madrid se emocionó cuando finalizó el partido. Lágrimas de rabia por su mejilla, porque sintió perder esta Liga y no poder culminar esta gran remontada.
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