El impuesto madridista que ya aplican en media Europa

La última obsesión de Florentino Pérez tras la salida de José Mourinho del Real Madrid tiene un nombre: Carlo Ancelotti. El entrenador, que tiene contrato con el PSG, ya ha movido ficha para tratar de forzar su salida hacia Madrid aunque su actual club tiene muy claro que no dejará salir al técnico italiano a coste cero después de que el segundo mandato de Florentino Pérez como presidente del Real madrid se haya caracterizado por el pago por fichar entrenadores, algo sin precedentes en el mundo del fútbol, donde eran los futbolistas los que movían las cantidades económicas con su traspaso.

El propio mandatario madridista ha reconocido en sus últimas entrevistas que "Ancelotti encaja muy bien en la cultura del Real Madrid", dejando claro, eso sí, que los contactos que ha mantenido con entrenador y PSG no han dado resultados por la negativa del club francés. Y es que Florentino Pérez, según informaciones publicadas en los últimos meses, ha llegado tarde a la operación ya que algunos medios como El Confidencial ya publicaban en el mes de enero que Carlo Ancelotti había incluido una cláusula en su contrato que le permitía salir del PSG en el caso de que llegara una oferta de un club como el Real Madrid, mientras que Onda Cero, en Al Primer Toque, aseguraba según fuentes cercanas al entrenador que este había llegado a un acuerdo con el club parisino en el mes de diciembre para abandonar el club a final de temporada debido a la deriva negativa que por entonces atravesaba el nuevo rico del fútbol europeo. En el contrato, sin embargo, se incluía una renovación automática que se podía ejecutar si el PSG acababa entre los tres primeros clasificados -acabó ganando la Ligue 1-, extremo que ha condicionado sobremanera las negociaciones en las que ha entrado el Real Madrid tras la marcha de Mourinho.

Llegados a este punto fue el PSG el que cogió la sartén por el mango para negociar una cantidad. Las últimas informaciones hablan de un acuerdo fijado en los cuatro millones de euros para permitir la salida de Ancelotti, aunque la falta de un entrenador de garantías para el equipo parisino está retrasando el fin de las operaciones. Está claro, eso sí, que Florentino Pérez tendrá que echar mano a la cartera de nuevo para poder hacerse con su nuevo técnico -a pesar de que este ha pedido su salida personalmente- como ya hizo en el pasado sentando un precedente que se le ha vuelto en su contra incluso teniendo a su favor los deseos del entrenador italiano.

Ancelotti será el tercer entrenador por el que tenga que pagar el Madrid después de haberlo hecho anteriormente por Manuel Pellegrini y José Mourinho. Según el propio Florentino Pérez, la llegada de estos dos técnicos tuvo un coste oficial de dos y ocho millones de euros respecitivamente -Mou tenía una cláusula de rescisión con el Inter de 16 millones-, aunque a estas cantidades habría que sumar también el precio del finiquito del chileno, predecesor del técnico portugués que ya está a las órdenes del Chelsea de nuevo.

La poco clara estrategia deportiva que ha seguido Florentino Pérez en el mandato que acaba de expirar renovándose en el cargo de presidente sin tener rival en las urnas ha dado como consecuencia una estrategia clara en el resto de equipos europeos, que optan por obligar al Real Madrid a pagar si este quiere hacerse con un nuevo entrenador. Ese será el camino que se siga con Ancelotti, con unas cifras intermedias en esta nueva partida en los presupuestos que ha tenido que incluir el Madrid, porque así decidió asumir el riesgo en su día el propio Florentino Pérez, de quien los rivales sacan provecho de una lección muy bien aprendida.