Laurent Blanc, una apuesta de transición que puede encajar en este Barça

“En la filosofía del juego, todos estamos de acuerdo que es un placer ver jugar al Barça. Es un placer para los amantes del fútbol”. Esta frase es de Laurent Blanc, pero no es nueva. El técnico francés, que según L’ Équipe es pretendido para ocupar el banquillo del Camp Nou, la pronunció en 2010, justo en el momento de mayor brillantez de la era Guardiola.

Una década después convendría ser honestos y realistas y evitar hacer análisis señalando que con Blanc a los mandos de la nave azulgrana se puede recuperar aquel placer para la vista y para el juego. La misión del extécnico del PSG y de la selección francesa en Can Barça sería, en caso que Quique Setién no siga, la de preparar una transición mejor que la que está ofreciendo el cántabro hasta que Xavi Hernández ocupe ese puesto.

En este contexto, Blanc podría ser una buena opción para el Barça, como apuntan nuestros compañeros desde la redacción de Eurosport Francia. “Si el Barça está buscando un técnico para uno o dos años hasta que llegue Xavi, Blanc puede ser ideal”. Conviene matizar también que hace cuatro años que no entrena, desde que le invitaron a abandonar el PSG para ser sustituido por Unai Emery. En París no supo sacar jugo a las inversiones cataríes para llegar a lo más alto de la Champions League. Pero, ¿quién lo ha conseguido allí? Ni él, ni Ancelotti anteriormente ni más recientemente el propio Emery o ahora el alemán Tuchel.

Tampoco Blanc fue capaz de rearmar a la selección francesa tras el descalabro del Mundial de Sudáfrica 2010. En la Eurocopa 2012 cayó ante España en cuartos y el once del gallo debió esperar a la gloria en Rusia y anteriormente en el europeo que organizaron en casa, perdiendo inexplicablemente la final ante Portugal, con Cristiano lesionado. Pero esos fracasos no fueron responsabilidad directa del célebre central campeón del mundo en el 98.

Él conoce al club, sólo una temporada en la que jugó 28 partidos y ganó Copa del Rey y Recopa de Europa a las órdenes de Bobby Robson. Sabe por tanto cómo se las gasta el famoso ‘entorno’ y por su experiencia debe ser plenamente consciente de que de puertas para adentro del vestuario deberá conciliar y acatar el ego y las exigencias de Leo Messi.

En este sentido, desde Francia nos apuntan a que él es un técnico flexible, que huye del conflicto y silencioso, por lo que no dará ningún show en rueda de prensa y probablemente no deje críticas entre líneas hacia otros colegas ni rivales o directamente al empedrado como Setién acostumbra en ocasiones.

Con el Burdeos o con el PSG siempre apostó por la vistosidad, por cuidar la posesión del balón y por darle sentido al juego. “Él estaría encantado de relanzar su carrera en un club de la dimensión del Barça. Además siempre ha nombrado su estilo como definición de buen juego y su filosofía es perfecta”, concluyen desde Eurosport Francia.

La realidad azulgrana ahora mismo parece marcada por esa ambiciosa conjura Messi-Setién por traerse la Champions League. En caso de que se cumpla y siguiendo la única certeza en todo este asunto, las palabras del presidente Bartomeu señalando que la intención del club es que siga el actual técnico, la opción Blanc se quedaría en una bonita portada de L’ Équipe. Aunque, eso sí, la definición de “Caballero Blanco” aunque juegue muy bien con su propio apellido tiene un significado digamos… difícilmente interpretable por el hastiado y purista seguidor culé.