El Real Madrid ya sí vende a los 'buenos'

Tras la venta de Di María parece confirmarse un cambio de tendencia en la forma de actuar en el mercado por parte del club de la Castellana. El Real Madrid ha comenzado a deshacerse de algunos de sus mejores jugadores para ingresar dinero en las arcas.

El Real Madrid siempre ha sido señalado en los mercados de fichajes como un comprador, además uno de los que paga bien. Cuando quieren un jugador no dudan en ir a por el hasta que lo consiguen.

Bien sea por la presión del jugador o por las cantidades que Florentino Pérez presenta como aval, lo que se propone el presidente lo acaba consiguiendo. Por el contrario salir del club siempre resultó complicado y si llegaba el caso las circunstancias debían de ser muy especiales si los que querían irse eran futbolistas de calidad.

Especialmente si se trataba de un jugador de gran nivel y que fuese clave para el equipo. Sin embargo, parece que en los últimos años también los buenos futbolistas han comenzado a ser vendibles.

Este año el crack que ha salido ha sido Ángel Di María en dirección Manchester. Diego López, un portero de garantías también ha dejado el club para irse a Milán.

La venta de última hora de Ozil al Arsenal el pasado verano sorprendió a todo el mundo, un verano donde también se marchó del Madrid Gonzalo Higuaín camino de Nápoles.

Y echando la vista algo más atrás también se encuentran los casos de los holandeses Arjen Robben y Wesley Sneijder.

ROBBEN Y SNEIJDER

Fuente de la imagen: Imago

Cambio de tendencia

Así que parece que hay un claro cambio de tendencia en la política de ventas del Real Madrid. Los fichajes que llegan a la casa blanca son siempre de calidad pero algo impensable hace unos años, vender a estrellas, ha comenzado a convertirse en una realidad.

Nunca ha parecido que los merengues hayan tenido la necesidad de ingresar grandes cantidades por la venta de jugadores pero sus desembolsos de los últimos años puede que también necesiten de una pequeña compensación en las cuentas del club con ventas como la de Ozil y Di María, 50 y 75 millones de euros, respectivamente.