El día que Mourinho lloró

Poco a poco se van filtrando detalles de la biografía no autorizada que Diego Torres ha escrito sobre José Mourinho. En ella se recoge el momento más débil en la vida del exentrenador del Real Madrid, que habría llorado amargamente al conocer que no era elegido para sustituir a Alex Ferguson, al frente del Manchester United.

Se esfumaba así el sueño de un Jose Mourinho que siempre ha manifestado su amor por los red devils y ser el sustituto del eterno Si Alex. El periodista de El País relata que sus interlocutores le contaron que el portugués vivió sus horas más amargas al saber que David Moyes era el elegido, al punto de decir que “Moyes no ha ganado absolutamente nada”.

Según relata el periodista, el palo fue tan grande que ni siquiera Jorge Mendes, su representante y amigo, se atrevió a descolgar el teléfono para decirle a Mou que no cumpliría el mayor deseo de su vida. Fue otro empleado de su empresa, Gestifute, el que tuvo que pasar por el trago de comunicárselo.

No obstante es algo que venía barruntándose en los círculos más cercanos al Manchester donde Bobby Charlton, voz más que autorizada, ya había dado una pista meses antes de la jublilación definitiva de Ferguson. La leyenda británica respondió al ser cuestionado por Mourinho con un simple “es un buen entrenador, sin más”. Fuentes cercanas aseguran que el día que Mourinho metió el dedo en el ojo a Tito Vilanova en aquella Supercopa, fue su sentencia.