The Best 2019: Resultaba paradójico

Resultaba paradójico, en efecto, tratar de justificar de nuevo lo de que como Messi no había ninguno actualmente. Ni probablemente lo habrá en el futuro. Porque será casi imposible igualarlo.

Pues a vueltas con la ignominia de cada año, que al final no se produjo, habría que recordar verdades como puños de UFC. Porque resultaba paradójico cómo sistemáticamente Messi se quedaba fuera del único lugar posible, el cajón más alto, el que más lo debiera acercar a su destino final, el Olimpo del deporte, ese mismo que le negaba no el pan (de eso va bien servido, que se lo ha ganado) sino la sal, por darle gusto a victoria y no olor a napalm por las mañanas de los misiles que le tiraban contra su ego.

Resultaba paradójico que Messi, para empezar, no hubiera ganado ni una vez en sus ediciones anteriores el premio The Best, el invento FIFA para competir con France Football, medio que instauró en la edad media del siglo XX (año 1956, a mediados de centuria) el otrora prestigioso trofeo Balón de Oro, últimamente coto de periodistas de bufanda.

Resultaba paradójico que los votos de capitanes, entrenadores, periodistas y aficionados por internet no cayeran del lado de Messi. Resultaba paradójico que se le exigiera siempre ganar la Champions League o el Mundial de fútbol para merecer un premio que es, por contra, individual. Resultaba paradójico que ahí, en lo individual (RAE: "Que tiene carácter particular e independiente dentro de un conjunto"), alguien le pudiera vencer. Como si no sirvieran las tres Botas de oro consecutivas, las Ligas españolas conquistadas con el Barça, la sensación de ciencia-ficción que irradia cualquiera de sus jugadas, los tiros libres que reinventan la geometría, el repertorio inacabable de su fútbol excelso e innato.

Resultaba paradójico que ni el mejor gol fuera para Messi, sino para un futbolista random húngaro del que nunca se volverá a saber.

Resultaba paradójico, por terminar de alguna manera, que The Best no se llamara The Worst. Sí, lo peor. Pero con Messi volvió a ser The Best.