Nueva denuncia de una exgimnasta contra Carballo por abusos

Según informa el diario El País, una mujer de 41 ha relatado a la policía el calvario por el que pasó cuando era una niña en el equipo de gimnasia y que va en la línea de los denunciado por Gloria Viseras contra el exseleccionador Jesús Carballo. "Empezó muy poco a poco, rozándome un poquito, acercándose mucho a mí. Casi ni te das cuenta. A veces cuando me daba un masaje le notaba muy excitado sobre mí. No se quitaba y yo aguantaba a que pasara. Nunca llegó a más”.

Esta mujer, que prefiere mantener su anonimato, estuvo en el equipo nacional hasta 1987, comenta que el exseleccionador Jesús Carballo, que hoy tiene 69 años y que ha estado en el puesto durante más de 30 años, inició su acercamiento cuando ella tenía 12 o 13 años. "Ni siquiera soy capaz de recordar cuándo empezó porque fue todo muy progresivo" y asegura que sufrió varios episodios de este tipo, tanto en el gimnasio como en el chalet en el que convivían todas las gimnastas del equipo durante las concentraciones y que también fue testigo de cómo el entrenador subía a la cama de alguna compañera. "Oía sus respiraciones", recuerda.

Una lesión la obligó a retirarse a los 16 años y asegura se fue bien con Carballo y el resto de entrenadoras, pero que rompió por completo con la gimnasia. "Solo he vuelto una o dos veces de visita". Además, dice que no lo denunció antes por el miedo a que sus padres le apartaran de la gimnasia. "Nunca se lo conté a nadie. Pensé en decírselo a mis padres, pero no lo hice, supongo que en el fondo tenía miedo de que me no me dejaran seguir entrenándome. Tampoco hablé con mis compañeras en ese momento. Éramos niñas muy inocentes, casi no teníamos relación con chicos. Mi hermano dice que éramos como robots. Además, le admiras como entrenador y el hecho de que te elija como gimnasta te hace sentir muy especial".

Esta exgimnasia reconoce que le "gustaría es encontrarme cara a cara con él (Carballo), que todas las que hemos sufrido esto pudiéramos decírselo", aunque admite que sus abusos no fueron tan graves como las que padeció Gloria Viseras. Sin embargo, su caso, como del Viseras, habría prescrito, ya que este tipo de delito caduca como máximo a los 20 años desde que la menor alcanza la mayoría de edad.