Alcaraz no entrena por precaución este viernes en Tokio para proteger su tobillo

La imagen del estreno de Carlos Alcaraz en Tokio no fue ningún puntazo o el mero hecho de imponerse a Sebastián Báez por 6-4 y 6-2. El motivo por el que más trascendió el debut del número uno del mundo en el ATP 500 de la capital de Japón fue la torcedura de tobillo que le provocó un susto considerable durante el primer set del partido.

Al hacer un cambio de dirección, su tobillo izquierdo no le respondió correctamente y Alcaraz tuvo que tirarse al suelo abruptamente, sin poder continuar jugando durante unos minutos. El murciano se vio obligado a solicitar un tiempo muerto médico y el suspense fue un hecho por momentos. Todo hasta que Carlitos se vio capacitado para poder seguir jugando y acabar imponiéndose.

Hasta él mismo reconoció que llegó a asustarte en un primer momento, pero que con el final del partido, el dolor no fue a más una vez se terminó su compromiso de primer ronda. Sin embargo, la decisión del equipo de Alcaraz ha sido la de no forzar la máquina este viernes, después de que todavía sintiera algo de dolor en la zona y no saltará a pista para entrenar este viernes, como en un principio sería lo normal, dejando pasar las horas a la espera de ver cómo evoluciona su tobillo para el compromiso de octavos de final que tiene este sábado frente al belga Zizou Bergs, como ha informado Marca.

Los esfuerzos del número uno del mundo se centran en lograr estar a punto trabajando junto a su fisioterapeuta Juanjo Moreno, desplazado junto a Samuel López, su hermano Álvaro y su agente Albert Molina, en la capital nipona. El duelo ante Bergs tendrá lugar el sábado 27 de septiembre en el último turno de la sesión de noche, en torneo a las 11:00 hora española.