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Blog Murciego: Desescalada en las pistas

Fernando Murciego

Actualizado 26/05/2020 a las 08:35 GMT

Con toda España en Fase1, una buena parte de los profesionales del tenis han podido reanudar ya sus entrenamientos en pista, lugar que no pisaban desde hacía más de dos meses. Roberto Bautista, Nicola Kuhn y Rubén Ramírez nos cuentan sus experiencias en este ansiado regreso.

Roberto Bautista (Open de Australia 2020)

Fuente de la imagen: Getty Images

Después de más de dos meses en estado de alarma por la pandemia coronavirus, España celebra desde esta semana que todas sus provincias hayan pasado, como mínimo, a la Fase1 de las desescalada. En lo que a la práctica del tenis se refiere, la noticia es doblemente importante, ya que los profesionales ya pueden volver a coger su raqueta y acudir a las pistas para entrenar. En algunos territorios, como la Comunidad Valenciana, esta etapa lleva ya una semana en marcha, así que nos dirigimos allí virtualmente para conocer cómo ha sido la experiencia en algunos jugadores del circuito.
“Los primeros entrenamientos han ido bien”, nos cuenta Roberto Bautista, número 12 del ranking ATP. “Lo más importante era ir poco a poco con el volumen de entrenamientos y de golpeos. Tenemos ya muchos años de experiencia en pretemporadas, sabemos cómo volver a jugar después de largos períodos de descanso, así que empezamos haciendo sesiones de una hora y luego vamos subiendo paulatinamente la duración. También hemos ido intercalando días, ya que todavía queda mucho tiempo para volver”.
Eso en Castellón, ahora nos movemos hasta Alicante, donde nos atiende Nicola Kuhn. “Las sensaciones han sido buenas. Por suerte, durante la cuarentena he podido practicar en una azotea grande con pared, así que la vuelta a las pistas ha sido relativamente fácil”, explica desde su domicilio en Torrevieja. “Ahora mismo es como si estuviéramos haciendo una pretemporada, mucho físico y mucho tenis, intentamos seguir con esta evolución. Físicamente me veo mejor, hemos subido casi siete kilos de músculo, por lo que ahora en pista encuentro una eficiencia mucho mayor”.
Pero no solo nos interesa el relato del jugador, también es importante escuchar lo que sucede al otro lado de la red. Rubén Ramírez Hidalgo, al frente de su equipo de competición ubicado en el Arena Alicante, enumera los pasos a seguir desde la docencia. “Cuando empezó la cuarentena diseñamos un plan físico para cada jugador dependiendo de los utensilios que tuvieran a mano cada uno. Algunos tenían terraza en su casa, otros contaban con alguna pesa, otros incluso bicicleta elíptica, dependiendo de eso fuimos adaptando cada programa para que siguieran trabajando. Empezaron con dos series de físico, mañana y tarde, luego ya les pusimos solamente una. La verdad es que todos han trabajando muy bien”, señala el que fuera Nº50 del mundo en 2006.
çHasta que llegó la Fase1, el momento de reencontrarse con la pista, momento donde los desafíos se multiplicaron. “Sobre todo hemos tenido mucho cuidado con la intensidad y el tiempo en pista”, subraya el técnico de 42 años. “Esta gente vive acostumbrada a estar sin parar todos los días y ahora llevan dos meses sin moverse, sin golpear una bola, así que el riesgo de lesión es bastante alto. Nos centramos en los controles, mucha bola por el centro, pocos desplazamientos, y aún así muchos duraron un día o un día y medio. En seguida les empezaron a salir llagas en pies y manos del contacto que no habían tenido con la raqueta las semanas previas. Incluso yo estoy en la misma situación. Ahora el reto es volver a sentir la pelota hasta que el cuerpo se acostumbre de nuevo a cada repetición”, valora Ramírez Hidalgo.
Para Roberto Bautista, vigente campeón de la Copa Davis, la desescalada en cuanto a ejercicios está bastante definida. “Pasar muchas bolas, eso es lo primordial. Hemos intentando impactar muchas veces a la pelota para recuperar las buenas sensaciones. Es evidente que se nota mucho el parón de dos meses, pero he hecho un buen trabajo físico durante este tiempo. Noto que ya estoy en buena forma en pista, después de 6-7 sesiones ya tenía encima la intensidad real que buscaba. Obviamente, todavía me queda recorrer ciertas etapas para llegar al 100%, pero vamos en el buen camino”, comenta el semifinalista de Wimbledon 2019.
Unas sensaciones muy parecidas a las que tiene Nicola Kuhn, doce años más joven y más enfocado en la evolución de todos sus golpes. “Sabiendo que los torneos vuelven en agosto, todavía tenemos tiempo para mejorar en todos los ámbitos: derecha, revés, saque, volea y saque. Hay que mejorar todo, no nos podemos conformar con lo que tenemos, hay muchos aspectos que corregir. Espero disputar algunos torneos de preparación en julio y así entrenar todo lo que vengo entrenando estas semanas en el Club de Tenis Torrevieja. Ahora mismo estoy muy feliz de cómo están yendo las cosas”.
Ninguno de ellos recuerda haber estado tanto tiempo parado sin que una lesión hubiera sido el motivo. Ahora es al revés, después de un descanso tan prolongado, los riesgos de lesión se multiplican. “Sí he tenido algunas molestias en los codos, me duelen un poco, pero espero que poco a poco las articulaciones se vayan adaptando. Seguro que con el trabajo de fisioterapeuta que hacemos cada día se resuelva pronto”, asegura Bautista, a quien veremos este verano compitiendo en la Liga Mapfre de tenis por España. “Para sentirme bien no necesito mucho más, creo que con un mes más de entrenamientos estaré al nivel que quiero estar. Al final, solo podremos valorar nuestro estado cuando volvamos a competir, sobre todo en las semanas de después, donde se verá la culminación del trabajo que hemos estado realizando hasta ahora”.
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