Masters 1000 Indian Wells, Nadal-Nishikori: Así se derriba a un kamikaze (6-4 y 6-3)

Rafa Nadal: Enorme partido de Rafa Nadal. Uno de los más completos que se le recuerdan al tenista de Manacor en mucho tiempo. Cambió alturas, fue agresivo, sirvió bien y planteó un envite táctico e inteligente. Sin ser excesivamente superior, su rival bailó al son que tocaba la raqueta del jugador de Manacor. Hoy, en algunas situaciones y bajo un sol de justicia, se vio al mejor Rafa Nadal que recordamos.

Kei Nishikori: Pocos jugadores hay en el mundo del tenis con la determinación que tiene este gran tenista nipón desde fondo de pista. Un jugador que golpea durísimo y tiene la agresividad grabada en su ADN. Al puro estilo de los bravos pilotos japoneses. Sin embargo, hoy encontró una barrera infranqueable en un jugador que le sacó de su zona de confort y que le hizo dudar en los momentos claves del duelo.

Entró Rafa Nadal en el partido con dudas. Sin ritmo de juego y algo lento de piernas. Una situación que aprovechó Kei Nishikori para romper el servicio del español y empezar a mandar en el marcador. Con malas sensaciones y un rival muy entonado el primer set parecía perdido, pero una vez más la fortaleza mental del tenista español tuvo premio. Aguantó en pista y firmó un break tan inesperado como sorprendente que le permitió entrar en la lucha por el set. En 45 minutos liquidó la primera manga Rafa Nadal, con un 87% de éxito con el primer servicio y tras salvar la friolera de seis bolas de break.

Las buenas sensaciones lanzaron al tenista de Manacor hacia la victoria. Un rápido break en el segundo juego de la segunda manga le permitió tomar una ventaja que ya no le abandonaría. Hubo lucha, hubo dudas y hubo tensión en los últimos juegos de partido, pero este Rafa Nadal parecía más decidido que nunca a volver a brillar. Y a fe que lo hizo.

NUESTRA OPINIÓN: Hay esperanza. Esa es la mejor valoración que se puede sacar del partido firmado por Rafa Nadal. Hacía demasiado tiempo que el tenista español no se mostraba tan fuerte y convencido. Hacía mucho tiempo que Rafa Nadal no se parecía a Rafa Nadal. Todavía no ha vuelto. Pero está en camino.