Florida, vedado para los españoles

Cayo Vizcaíno no es español. La 'Armada' ha abordado su conquista en numerosas ocasiones, pero nunca ha regresado a España con el título bajo el brazo. Desde que Sergi Bruguera se quedara a las puertas en 1997, hasta en seis ocasiones un español ha perdido la final.

Bruguera cedió en tres sets ante el austriaco Thomas Muster, cuando las finales de los torneos de la categoría todavía se disputaban al mejor de cinco. Seis años después, Carlos Moyá cayó derrotado ante el local André Agassi, antes de dar pie a las tres derrotas de Rafa Nadal.

El manacorense se plantó en su primera final en Florida en el año 2005, pero tras ganar los dos primeros sets sucumbió en los tres siguientes ante Roger Federer, en un histórico partido en el que ya se aventuraba una incipiente rivalidad entre ambos. Tres años después, fue el ruso Nikolay Davydenko el que le apartó del título en dos sets; y en 2011 fue el serbio Novak Djokovic el que le remontó el primer set para llevarse el título, iniciando de esa forma su mágico año en el que se elevó hasta lo más alto del ránking.

Finalmente, en este 2013 fue David Ferrer el que aprovechó la ausencia de su compatriota para plantarse en la final. El de Jávea tuvo el título al alcance de la mano, e incluso llegó a pedir un ojo de halcón con 'match point' a favor, una decisión que le habría hecho campeón de haber acertado. No fue así. La bola de Andy Murray entró y el escocés se llevó el gato al agua en el 'tie break'.

Ferrer firmó así el 0-6 de los españoles en finales de Indian Wells, un torneo que conoce campeones de diez países distintos. Estados Unidos es el claro dominador con 14 triunfos, destacando los seis de André Agassi, los tres de Pete Sampras o los dos de Andy Roddick. Muy lejos está la República Checa con tres victorias (dos de Lendl), al igual que Serbia, todas ellas de Djokovic.

Con dos títulos aparecen Suiza y Gran Bretaña gracias a Federer y Murray, mientras que han ganado el trofeo en una ocasión Suecia, Austria, Chile, Holanda y Rusia. La ausencia de España en el palmarés comienza a ser notable.