Masters 1.000 Montecarlo, Nadal-Khachanov: De exhibición en exhibición (6-3 y 6-2)

Rafa Nadal. Cuando todo está en su sitio y el físico le acompaña, es una gozada poder disfrutar de un partido del número uno del mundo en tierra batida. Derechas ganadoras, moviendo a su rival de lado a lado de la vista, puntos con magia y un sinfín de adjetivos para describir al que sin duda, es el mejor jugador en arcilla de la historia del tenis. En Montecarlo está volviendo a demostrarlo, y su víctima en esta ocasión fue un perdido Karen Khachanov.

Karen Khachanov. Durante cinco minutos pudo igualar el primer set y volver a meterse en un partido en el que estuvo más fuera que dentro en el resto de envite. No fue rival ante un entonado Nadal y acabo prácticamente pidiendo la hora, cansado y sin argumentos sobre la pista. Si tenía que firmar un partido casi perfecto para superar al balear, no prestación no se acercó a lo que requería la situación.

La figura de Nadal en Montecarlo sigue escribiendo capítulos victoriosos, de un nombre que incluso se ha ganado el que bauticen la suite del hotel donde se suele alojar en el principado monegasco. Su puesta en escena ante Karen Khachanov hizo honor a las historias de grandeza pasadas, de un jugador prácticamente inexpugnable en tierra batida.

Un primer set con poca historia, para las opciones del ruso, que solamente encontró un oasis en el vendaval balear, cuando aprovechó los errores del número uno para recuperar el break que desde el inicio del parcial, Nadal tenía como ventaja. Nada más lejos de la realidad. El español tardó poco en recuperar la buena senda que le llevaba a mover de lado a lado de la pista a Khachanov impotente cuando era dominado por la potente derecha del manacorí (6-3).

No tuvo más contenido el partido, sino saber cuándo iba a poder Nadal cerrar la segunda manga. Una nueva rotura a las primeras de cambio le allanaba un camino, que remataba con la segunda consecutiva. Nada podía hacer un Khachanov que resoplaba con cada golpe a la línea del español, que encontraba el blanco de la pista con suma facilidad (6-2). Su rival en cuartos de final será un viejo conocido, Dominic Thiem, el único que le consiguió ganar un partido en tierra en 2017, en los cuartos de final del Masters 1.000 de Roma. Sin embargo, en Montecarlo, Barcelona y París, el resultado fue favorable al balear.