Wimbledon 2016, Williams-Vesnina: Última parada del trayecto ruso (14:00)

Serena Williams cada vez tiene más cerca el objetivo de conquistar por séptima vez Wimbledon (marca con la que igualaría a Roger Federer siempre que el suizo no termine ganando esta edición) y acercarse un poco más a los nueve de Martina Navratilova. La estadounidense ha demostrado en las últimas rondas un nivel de juego varios cuerpos superior al del resto de tenistas, y espera seguir dándole continuidad a su momentum cuando se cruce con Elena Vesnina en las semifinales.

Vesnina es la tercera rusa que se cruza en el camino de Serena hacia el título en Londres, todas de forma consecutiva. A diferencia de las otras dos -Svetlana Kuznetsova y Anastasia Pavlyuchenkova-, Vesnina no goza de la condición de cabeza de serie en el tercer major del año, lo que la convierte, sobre el papel, en la tenista más débil de aquellas que se ha cruzado en lo que va de semana.

Natural de Leópolis, Ucrania, pero nacionalizada rusa, Vesnina está disfrutando en este mes de julio después de haber atravesado su peor racha como tenista profesional en los últimos meses. A finales de 2015 y comienzos del presente año tocó fondo, abandonando el top 100 de la WTA y siendo eliminada en la primera previa del Open de Australia. Ella misma recordaba todo ese camino de espinas que mermó su confianza hasta niveles desconocidos en su carrera: “He tenido un final y comienzo de año muy difíciles: caí del top 100, empezaba a jugar todos los torneos en las previas. Llevo jugados muchos partidos en mi carrera. No ha sido fácil, sinceramente, porque estaba en el top 30 y de repente estaba por el 120”.

Situada en el 50.º puesto de la clasificación WTA en la actualidad, Vesnina dio la gran sorpresa en la ronda previa, en la que descabalgó del torneo a Dominika Cibulkova. La rusa ni siquiera prestaba atención a que por ese mismo lado del cuadro llegaba la presencia amenazadora de Serena Williams, con la que finalmente se cruzará en la pista central: “No pensaba en mi cuadro. No veía quién me tocaba en la siguiente ronda, he tratado de disfrutar sobre la pista antes que nada, porque estoy en Wimbledon, uno de los mejores torneos de la historia del tenis, con las mejores jugadoras del mundo. Tengo que disfrutar aquí”, dijo reivindicando su derecho a saborear el momento tras tanto tropiezo.

Por su parte, Serena Williams aterriza en la penúltima fase del torneo con una tranquilidad pocas veces vista en el último año, en el que la recurrente estadística de los 22 Grand Slams de Steffi Graf se convirtieron en un tormento mayor aún que la presencia de Angelique Kerber o Garbiñe Muguruza en sus finales. En Wimbledon tiene de nuevo la oportunidad, y la gentileza de esta eliminatoria frente a la tenista con el ranking más bajo de todas las que quedan aún en liza la convierten en la protagonista absoluta, salvo cortocircuito mental, episodio que ya se vivió con anterioridad en el US Open, donde cayó sorprendentemente en semifinales. La eliminatoria entre la menor de las Williams y Vesnina será la de dos tenistas que han conseguido que las piezas encajen y volver a disfrutar de tenis después de sus recientes calvarios, cada uno a su nivel.