Wimbledon 2016, Djokovic-Querrey: El cortocircuito del campeón (6-7, 1-6, 6-3 y 6-7)

Novak Djokovic. El campeón de Wimbledon 2015 no podrá revalidar este año el título y dejará de ser el vigente campeón de uno de los cuatro majors la próxima semana. Djokovic se dejó ir en el inicio de un partido a priori sencillo, especialmente en el segundo set, y tras la reanudación no supo mantener la tensión competitiva suficiente para ejecutar una remontada muy complicada. El sueño del calendar Slam (los cuatro títulos grandes en el mismo año natural) tendrá que esperar.

Sam Querrey. El estadounidense se ha convertido en el héroe absoluto de Wimbledon, consiguiendo lo que ningún tenista parecía capaz de lograr: derrotar a Novak Djokovic. El de San Francisco supo cimentar su victoria en un primer set muy disputado y aprovechar la rendición temporal del serbio en el segundo. En la reanudación del día siguiente demostró una mayor entereza mental en una situación desesperante, con continuas interrupciones por culpa de la climatología. Nadie podrá decirle que su clasificación para octavos de final es inmerecida.

Novak Djokovic y Sam Querrey protagonizaron la montaña rusa más electrizante de lo que va de torneo en Wimbledon. El serbio y el estadounidense comenzaron su partido un viernes a última hora y lo terminaron casi 24 horas después, con cuatro interrupciones de por medio que desesperaban a jugadores y aficionados por igual, víctimas del irreular tiempo londinense. Querrey aprovechó tan inestable escenario para ponerse rápido por delante, tal y como la leyenda Pat Cash recomendaba: sin dar margen de maniobra a Djokovic. Su primer tie break provocó una fuerte duda interna en el serbio, que regaló de forma incomprensible el segundo set (1-6) -y finalmente el partido completo-, antes de que la lluvia pidiera paso.

Ya en pleno sábado, Querrey y Djokovic volvieron a la pista, el serbio sin margen de error alguno, y parecía dispuesto a intentar la remontada, pero nuevamente el cielo impidió el curso normal del partido y llegó a interrumpir la eliminatoria en tres ocasiones más. Nole intentó rehacerse conquistando el tercer set, pero en el cuarto Querrey detectó que no estaba ante el tirano del circuito en el que se había convertido Djokovic, sino ante un mortal con mucha confusión en su tenis, y ahí el de San Francisco terminó de apuntalar su victoria, culminada en un tie break de errores y contrastes en el que el número uno terminó por decir adiós al torneo por la puerta de atrás, sin llegar a la segunda semana siquiera. Fue el fin de semana mágico de Querrey.

El duelo que se vivió en Londres entre Sam Querrey y Novak Djokovic tuvo tantos tintes surrealistas que no se puede explicar desde parámetros lógicos. El estadounidense demostró que, basándose en su poderoso saque, los cañoneros tienen mucho que decir en Wimbledon, torneo diametralmente opuesto a Roland Garros en el que los dos campeones parisinos, Djokovic y Garbiñe Muguruza, ya han hecho las maletas con su favoritismo previo.