Indian Wells | Badosa-Azarenka: La primera reina del desierto 7-6 (5), 2-6 y 7-6 (2)

Los nervios parecieron atenazar la raqueta de Paula Badosa en un inicio de partido en el que tenía que vivir en el alambre para ver mejorar su tenis. Las bolas de rotura en contra eran una constante, pero la española parecía resurgir a pesar de que por sensaciones Azarenka parecía algo por encima en el duelo. Sin embargo, lo más importante para ella era que el marcador nunca estuvo desfavorable en la manga inicial y con ello, pareció tomar aire en un duelo en el que los peloteos y los puntos se eternizaban, para regocijo de un público que sufría un sol asfixiante.

También las tenistas, pero eso no hizo ni mucho menos que bajara el ritmo de un choque en el que fue Badosa la que terminó de golpear primero. Hubo muchos amagos en forma de bola de break para las dos contendientes, pero la catalana atrapó al vuelo una de las pocas veces que bajó la guardia su rival. Ni mucho menos estaba el trabajo hecho, Azarenka recuperó a las primeras de cambio y volvió a hacer lo propio cuando la española rompió de nuevo, teniendo el servicio para llevarse la manga (6-5).

El tie-break esperaba a un set que se alargaba por encima de la hora y que subía de emoción conforme se acercaba a su resolución. Volvió a golpear primero Badosa, que rápidamente se ponía con un 4-0 a su favor en el desempate, pero veía nuevamente como la bielorrusa no dejaba de pelear. Finalmente, Paula obtenía el premio a tanta lucha, cerrando la primera manga 7-6(5).

Si el primer set había sido una batalla de tú a tú, muy física y en el que los mínimos detalles habían decantado la balanza a favor de la española, Badosa sufrió en sus carnes el desgaste del partido y rápidamente vio como se lo complicaba en exceso el parcial, con dos breaks de Azarenka que cayeron como una losa en la moral de la catalana. Consiguió rehacerse y recuperar uno, pero la exnúmero uno del mundo estaba completamente desatada, con el objetivo entre ceja y ceja de levantar el partido (2-6).

El aviso de la bielorrusa sirvió de acicate para Badosa, que volvió a la batalla con fuerzas renovadas para pelear la final con todo lo que tenía dentro. La española resurgió y comenzó a jugar más profundo, conectó más golpes ganadores y se creyó que podía ganar la final cuando vio cómo se encontraba con el premio de un break.

Azarenka volvió a recuperarse y llegó a sacar por cerrar su tercer título, pero Paula Badosa no dejó de creer, algo que le ha llevado a lo más alto en Indian Wells. Forzó el tie-break y fue en ese momento en el que se creció hasta tal punto de acabar cerrando una final, que pocos minutos antes parecía perdida. Es la primera española que consigue levantar este trofeo en la categoría femenina.