Tiro con Arco

Como deporte el tiro no surgió hasta los siglos IV o V de nuestra era, aunque el arco y las flechas se conocen desde hace 10.000 años, y no alcanzó características parecidas a las actuales hasta la invención del arco de 1,8 metros en la Inglaterra medieval. El reglamento de la competición se estableció con motivo del primero torneo nacional británico en 1844.

El tiro de arco tanto masculino como femenino es deporte olímpico desde 1900, pero dejó de serlo en 1920 y se reincorporó en 1972. Fue en Seúl 1988 cuando se estableció la competición por equipos y en Barcelona 92 se decidió introducir la ronda olímpica para dotarla de mayor espectacularidad.

Precisamente en Barcelona 92, el equipo español de tiro con arco se apuntó un histórico e inesperado oro en la final masculina. El conjunto formado por Antonio Vázquez Megido, Juan Carlos Holgado y Alfonso Menéndez, quienes se impusieron a Finlandia, uno de los equipos favoritos, por un ajustado 238-236. La final fue de infarto. En la primera serie los españoles lograron un 81-73 y en la segunda un empate a 81, sin embargo en la tercera los finlandeses recortaron las diferencias. Para conseguir la victoria Vázquez debía alcanzar la zona 9 con su última flecha, lo cual consiguió.

El tiro con arco es, sobre todo, un deporte de precisión, por lo que en principio su práctica requiere una gran capacidad de concentración y agudeza visual, pero también una correcta preparación física. En un torneo olímpico el arquero recorre durante sus desplazamientos a la diana una distancia aproximada de diez kilómetros y según datos de la FITA el tirador desarrolla un esfuerzo similar a ocho o nueve toneladas de tensión sobre el arco al lanzar las 300 flechas que utiliza durante los dos días que dura la competición.

La competición se desarrolla por el sistema de eliminatorias. Las pruebas individuales engloban 64 arqueros que tiran todos al mismo tiempo a dianas situadas a 70 metros de distancia, de acuerdo con las reglas de la Federación Internacional de Tiro con Arco. Cada arquero dispara seis grupos de tres flechas mientras que en la final se disparan cuatro series de tres flechas, en ambas con un tiempo máximo de 40 segundos entre cada flecha. Mientras que por equipos, forman parte tres arqueros por cada conjunto. Cada miembro del equipo dispara 9 flechas y el límite del tiempo está en tres minutos, es decir, 20 segundos por flecha. En las competiciones por equipos los arqueros pueden recibir instrucciones en la línea de disparo, lo que no está permitido en competiciones individuales.

La diana tiene 1,22 metros de diámetro y el centro está situado a 1,3 metros del suelo. El color varía cada dos aros, de dentro a fuera son: amarillo, rojo, azul claro, negro, y blanco. Dichos anillos concéntricos que se han de puntuar del 1 al 10, siendo el centro el 10. Además, en el centro hay un pequeño círculo, llamado a X10, que sirve para desempatar y en el que consigue la victoria el que mayor número de X10 consiga. Los arqueros puntúan cada final sumando los puntos de cada flecha y las que estén tocando una línea se puntúan con la puntuación mayor.

El arco pesa más de 22 kilogramos para los hombres y 15 para las mujeres, y el reglamento prohíbe apoyarlo en el suelo para disparar las flechas. Por su parte, las fechas tienen un diámetro máximo de 11 milímetros. Debe estar marcada con el nombre o iniciales del arquero, y llevan colores o marcas para distinguirlas.