Varane, central de grandes catedrales

La cascada de elogios que ha venido recibiendo Raphaël Varane en los últimos años no es ninguna frivolidad. Los dos entrenadores que lo han tenido a sus órdenes en el Real Madrid, José Mourinho y Carlo Ancelotti, se han rendido ante la exultante calidad y sangre fría que presenta el central francés en un club de la exigencia del Real Madrid, lo que ha llevado a Didier Deschamps a hacerle hueco en la selección francesa, pero esta reputación viene dada gracias a su capacidad para mantener la calma en escenarios en los que a muchos otros jugadores les tiemblan las piernas.

“En Varane tenemos un central ‘top’ para los próximos 10 años”, comentó en su momento el entrenador portugués, que optó en los últimos meses de competición por él en lugar de Pepe, lo que generó un frente bastante polémico en las convocatorias del Real Madrid. A pesar de verse relegado a la suplencia, Pepe tuvo un papel clave en la progresión de Varane, según reconoció él mismo -"me ha inculcado esa cultura del hambre de ganar".

Su gran consolidación como jugador de elite llegó la pasada temporada en la eliminatoria de Copa del Rey entre el Real Madrid y el Barcelona. Con el calor de su afición, Varane cuajó un partido casi impoluto en la ida anotando el gol de los blancos, lo que permitió viajar a Barcelona con 1-1 en la eliminatoria.

En el partido de vuelta ejerció como auténtico ‘kaiser’ de la zaga de Mourinho con Sergio Ramos como compañero. El Barcelona chocó constantemente contra Varane sin conseguir ponerse en ventaja en la eliminatoria, lo que permitió que el Real Madrid llegara a defender un escandaloso 0-3 en el Camp Nou, con el tercer gol obra del joven defensa de 20 años nacido en Lille.

Con medio mundo aún asombrado por la exhibición de febrero en tierras culés, Old Trafford fue el siguiente coliseo europeo que sometió con su calidad y aplomo. La eliminatoria se convirtió en una guerra de nervios entre dos grandes que tenían demasiada responsabilidad en la máxima competición continental, y la balanza terminó decantándose por el Real Madrid.

Según los datos aportados por OPTA para la web especializada en estadísticas WhoScored, el rendimiento del francés estuvo solo por detrás del de Cristiano Ronaldo y Luka Modric, sumando nueve despejes ante una delantera formada por Robin van Persie, máximo goleador de la Premier League, y Danny Welbeck.

Después de clavar la bandera con su nombre en Barcelona y Mánchester, Varane pretende que su nombre vuelva a sonar con fuerza en Turín, donde se enfrenta a la Juventus de Paul Pogba, compañero de generación con el que ha compartido internacionalidades en la selección francesa. Tévez y Llorente tendrán un hueso duro de roer en un maestro del ‘tackling’ elegante.