Atlético-Bayern Múnich: A jugársela a Salzburgo

ATLÉTICO: Oblak, Trippier, Savic, Giménez (Felipe 66' ), Hermoso, Koke, Saúl, Carrasco (lodi 86'), Llorente, Correa (Herrera 78') y Joao Félix (Lemar 86')

BAYERN: Nübel, Sarr (Richards 61'), Süle, Lucas Hernández, Alaba, Javi Martínez (Muller 61'), Musiala (Stiller 75'), Sané, Arrey-Mbi (Gnabry 61'), Douglas Costa (Zirkeee 86')y Choupo-Moting

ÁRBITRO: Clement Turpin. Amarilla a Sarr.

GOLES: 1-0, Joao Félix (26'); 1-1, Muller, de p. (85')

El Atlético se ha insuflado de un descaro juvenil espoleado por la magia de Joao Félix y el talento de un jugador muy crecido en su segudna etapa rojiblanca como Carrasco. Si a eso se suma el dinamismo de Marcos Llorente y Correa, resulta un equipo divertido de ver, un equipo que propone con la pelota en los pies sin rasgo de cholismo. Y en esta ocasión además estaba exigido por la necesidad de ganar para sellar el billete a octavos y por un rival como el Bayern. Cierto que Flick, con el equipo ya clasificado, probó muchas cosas, pero seguía teniendo jugadores como Sané, Douglas Costa, Choupo-Moting o un chico con una pinta excelente como Musiala. Desde el inicio mandó el Atlético, que complicó la vida con las apariciones al espacio de Joao y Llorente. Dos equipos valientes ofrecian un cruce de golpes muy divertido, pero los rojiblancos necesitaban ganar y se notaba. En el minuto 26 Llorente llegó a la línea de fondo y puso el balón al primer palo, donde Felix clavó el balón en la red. Pudieron aumentar la renta los de Simeone con ocasiones claras, pero al descanso el gol del portugués clasificaba a los atléticos para octavos. Pero faltaban 45 minutos y enfrente estaba el Bayern...

La segunda parte arrancó con el mismo escenario, hasta la hora de partido. Momento en que Flick sacó más madera al campo con Muller y Gnabry. El partido se convertía en un duelo de ida y vuelta, más abierto de lo acosnejable incluso para los del Cholo. Cambió el panorama con un duelo más de poder a poder, más presión de los alemanes, más verticalidad en su ataque. Pero los rojiblancos aguantaban sin conceder oportunidades claras a los de Flick y los minutos gooteaban lentamente. Metía el Bayern arsenal ofensivo y blindaba Simeone el campo con Herrera y Felipe. El Atlético, ahora sí en perfil cholista, se defendía con uñas y dientes. Metidos atrás, sufriendo, clausurando los pasillos interiores, cerrando las bandas... El premio era mayúsculo y los colchoneros tiraban de ADN cuando una zancadilla de Felipe a Muller provocó un penalti que echaba por tierra todo el trabajo a cinco minutos del final. Acertó Oblak el sitio, pero no pudo parar el disparo de Muller y empataba. Los de Simeone se la jugarán en Salzburgo, un escenario que evitó durante 85 minutos y al que quedó condenado por perdonar a un Bayern disminuido durante una hora.

No hizo falta que entrase en juego el videoarbitraje