El idilio no correspondido de Pep Guardiola con la Champions: busca su tercer título 12 años después

Tras ganar una como jugador en 1992 y perder otra en 1994 frente al poderoso Milan de Fabio Capello, Guardiola ganó la Champions League a la primera como entrenador. Ha llovido desde la final de Roma 2009 en la que su gran Barça derrotó al Manchester United de Cristiano Ronaldo. Apenas dos años después y en uno de los mejores partidos que se recuerdan en una finalísima, los azulgrana arrollaron al United en Wembley.

Desde entonces, diez semifinales entre Barça, Bayern y Manchester City y sólo una final a los mandos de la nave inglesa: la que perdió en Oporto en 2021 frente al Chelsea y en la que fue cuestionado por no alinear de inicio a un pivote defensivo, prescindiendo así de Fernandinho o Rodri.

A Guardiola se le mide, injustamente para muchos, por no ganar la Champions League pese a dirigir siempre plantillas multimillonarias o tal vez no haber aprovechado más y mejor a Leo Messi en su etapa en el Barça. Es el argumento perenne que siempre esgrimen sus críticos, igual que el de ganar ligas y copas nacionales con regularidad pero quedarse siempre a las puertas del máximo trofeo continental, que es el que otorga eternidad a equipos, jugadores y técnicos.

"Muchos clubes han destruido sus proyectos y sus ideas porque no fueron capaces de ganar esta competición. Aunque no comparto esta opinión entiendo que todo lo que hemos hecho estos años, tendrá sentido para mucha gente si ganamos este título. Si no, todo tendrá menos sentido. Es injusto, pero tenemos que aceptarlo", dijo Guardiola en una reciente charla con la UEFA.

“He llegado a diez semifinales de la Champions League, he jugado tres finales, ganado dos... Y ahora voy a por mi cuarta final. La competición me ha dado mucho más de lo que hubiera podido imaginar. Si mi vida terminara ahora mismo, habría ganado una como jugador en mi club, además de dos como entrenador, también en mi club", dijo Guardiola en una entrevista para la UEFA.

"El fútbol te da y te quita. La vida es muy injusta, pero lo que puede ser injusto para mí, puede ser justo para el Atlético de Madrid, para el Real Madrid o para el Barcelona. Así funciona el mundo. Siempre queremos más y más y eso no es correcto. Tienes que ser ambicioso, pero no avaricioso. Esta competición me ha dado muchos momentos malos, que me han hecho daño y que siempre estarán en mi mente, pero también me ha dado momentos muy bonitos. Así es como funciona el deporte y la vida", asegura un Guardiola que busca su tercera Champions y su segundo triplete, ya que el Manchester City en caso de ser campeón sumará los tres principales títulos en juego esta misma temporada.