Las cuentas del Barça para albergar un hilo de esperanza en la lucha por el título - El Clásico Real Madrid-Barcelona

La jornada 29 de LaLiga tiene preparado para este domingo (21:00) un Clásico en el Santiago Bernabéu entre Real Madrid y Barça. Un partido que paraliza al 'planeta fútbol' cuando azulgranas y madridistas se ven las caras sobre un terreno de juego, incluso cuando parece que la liga está sentenciada a favor de los de Ancelotti. ¿O no?

El Barcelona aterriza en Madrid a 15 puntos de distancia con respecto al Real Madrid, que lidera la clasificación de la competición doméstica con solvencia y puño de hierro. Una diferencia cualitativa y cuantitativa hasta el momento, pero que todavía no ha dilapidado por completo las esperanzas culés de poder dar un susto de aquí a final de temporada.

El Real Madrid aventaja al Barça en 15 puntos cuando quedan 10 jornadas para el final, 11 para el Barça, que todavía tiene un partido pendiente por jugar contra el Rayo Vallecano. Dicho partido se jugará en el Camp Nou, y si el Barça consigue ganarlo, la diferencia natural sería de 12 puntos y con un partido entre Barça y Madrid todavía por jugarse.

Desde la llegada de Xavi al banquillo, el de Tarrassa ha jugado un total de 15 partidos ligueros, con tan solo una derrota para sumar 34 puntos. Xavi ha conseguido implantar su idea y su estilo, reconvirtiendo al Barça de nuevo en un equipo reconocible, vistoso y contundente. Los nuevos fichajes se han adaptado a la perfección y el barco por fin navega con rumbo firme. Un barco que este domingo 20 tendrá una parada trascendental, en el puerto del Santiago Bernabéu. De conseguir la victoria en Madrid, el Barça tendría en su mano una virtual diferencia de tan solo diez puntos, reduciendo los 10 con los que cogió Xavi al equipo y permitiendo meter presión a su máximo rival con nueve jornadas por jugarse.

Si el Barça consigue vencer en el Bernabéu, además de meterle tres puntos al Real Madrid, el golpe anímico sería grande, incluso causando alguna duda al conjunto de Ancelotti con nueve jornadas por jugarse. El calendario del conjunto blanco es además, sobre el papel, un calendario muy complicado. Visitar Balaídos, el Wanda Metropolitano, el Sadar, el Sánchez-Pizjuán y el Nuevo Mirandilla no será para nada una labor sencilla. Cinco salidas lejos del Bernabéu en las que jugarán ante dos de los mejores equipos de la liga. El Sevilla, mejor local de la competición y el Atleti con todo lo que implica jugar un derbi lejos de tu estadio. Además, dos salidas muy complicadas como Vigo y Pamplona, y un viaje a Cádiz a dos jornadas del final, donde el conjunto gaditano se estará jugando la vida. Por si fuese poco, rivales como el Betis, inmersos en la pelea por la Champions, visitarán el Bernabéu.

Un calendario, a priori, más sencillo para un Barça que intentará dar caza hasta el final al Real Madrid, que se encontrará también en la disputa de los cuartos de final de la Liga de Campeones.

El Barça trata de buscar ejemplos en la historia, y dentro de su propio club hay uno reciente que marcó muchísimo la historia del club culé. En la temporada 2003-04, bajo la dirección de Frank Rijkaard, el Barcelona llevó a cabo una remontada que parecía inimaginable. En aquella plantilla jugaba un joven Xavi Hernández, actual entrenador del Barça.

En aquella temporada, en la jornada número 18, la diferencia entre ambos clubes era abismal. El Real Madrid sumaba 42 puntos por los 24 del Barça, una diferencia que parecía imposible de recuperar. Sin embargo, en 19 jornadas los culés lograron remontar esa cifra, dejando atrás al conjunto blanco. La Liga se la llevó el Valencia, pero el Barça materializó una de las mayores gestas de lo que llevamos de siglo. Un ejemplo que Xavi conoció en primera persona y que tratará de extrapolar y proyectar en su nuevo Barça.