Wimbledon 2016, Cepelova-Muguruza: Pesadilla en el All England Club (6-3 y 6-2)

Garbiñe Muguruza: Tierra trágame. Eso debió pensar Garbiñe Muguruza a la finalización de un partido de pesadilla. Un auténtico desastre para una tenista llamada a estar, como mínimo, en las rondas finales. El partido fue una secuencia de errores de la jugadora española. Errores impropios de ella y en algún caso sencillamente inexplicables.

Jana Cepelova: La tranquilidad y la inteligente lectura del partido fue el Leitmotiv que marcó la actuación de la jugadora eslovaca. Jana Cepelova supo aprovechar el puente de plata que le brindó su rival para colarse en tercera ronda contra todo pronóstico. Partido práctico y victoria importantísima para ella.

El desastroso porcentaje de éxito con su segundo saque, (1-8), condenó a Garbiñe Muguruza en una primera manga que apenas duró 30 minutos y donde Jana Cepolova lo hizo todo bien para sorprender a la tenista española. Media hora donde poco o nada se vio de la confianza con la que debutó Garbiñe Muguruza en la presente edición de Wimbledon.

Si el primer set sembró de dudas el tenis de la jugadora española, la segunda no hizo más que corroborarlo. Los errores no forzados se sucedían sin remisión y las posibilidades de una remontada eran cada vez más irreales. Los gestos de desesperación y negación cubrieron el rostro de la vigente campeona del torneo, que acabó cediendo un partido donde su servicio fue un auténtico chollo para su rival.

NUESTRA OPINIÓN: La adaptación a la hierba siempre es complicada y más en las primeras rondas. Una superficie traicionera donde los automatismos del juego de los tenistas cambian y mucho. Hoy Garbiñe Muguruza lo sufrió en sus propias carnes. Su merma física fue evidente y clave en su derrota.